Se inundaron los ambulatorios centrales
La lluvia mostró las fallas de construcción en el AICM
Bastaron sólo siete minutos de lluvia intensa sobre el edificio principal del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), recién ampliado a su "máxima capacidad" por la empresa española Inmobiliaria Fumisa, SA de CV, para que aparecieran más fallas de construcción. Ahora se reventó uno de los tubos principales del sistema elevado de desagüe de la nueva nave central, dejando escapar un torrente de aguas pluviales, donde se unen los ambulatorios centrales.
El chubasco fue momentáneo y no granizó. El tránsito vehicular se mantuvo sin contratiempos, lo mismo que todas las operaciones aéreas. Eran las 18.15 horas cuando comenzó a llover y a las 18.22 había escampado. Sin embargo, adentro, frente a la puerta de acceso número 7, donde se dividen las áreas nacional e internacional, de pronto comenzaron a filtrarse del techo grandes chorros de agua.
En unos cuantos minutos el líquido inundó la entrada que lleva a unos sanitarios, a una casa de cambio y a dos negocios de ropa. Fue tanta el agua que salió por el tubo reventado, según dijeron técnicos del AICM que se presentaron a atender el desperfecto, que fueron insuficientes las docenas de empleados que con jaladores, escobas, mecheros y cubetas intentaron atajar el agua .
Los pasajeros del aeropuerto no podían dar crédito que debajo de la majestuosa estructura cóncava ocurriera una inundación de esas proporciones. Esta vez, en pocos minutos hicieron acto de presencia algunos funcionarios del AICM, los cuales se contradecían sobre las medidas que debían tomar para atender el problema.