Criminales, ideas erróneas sobre la sexualidad, afirman
Practican "terrorismo educativo" los grupos que rechazan libro de ciencias
Organizaciones civiles, activistas, sexólogos y padres de familia calificaron de "terrorismo educativo" la decisión de grupos "minoritarios" de impedir la distribución del libro de ciencias para primero de secundaria, en el cual se aborda la educación sexual.
En conferencia de prensa solicitaron a la Secretaría de Educación Pública (SEP) garantizar la defensa y protección de los derechos sexuales de niños y adolescentes, a quienes debe impartir una "enseñanza integral, con bases científicas, libre de prejuicios y tabúes".
Eusebio Rubio, presidente de la Asociación Mundial para la Salud Sexual, que agrupa a más de 5 mil especialistas de los cinco continentes, calificó de "maniobra inmoral y criminal" la difusión de ideas "erróneas" en torno a la sexualidad, y agregó que la ciencia ha comprobado que "hablar a los jóvenes sobre el tema, no los induce a iniciarse en la actividad sexual".
Aseguró que los programas y textos educativos que se impartirá en primero de secundaria "no tiene nada de dañino, ya que es información indispensable, aunque insuficiente, para informar a los menores sobre el ejercicio de una sexualidad plena".
Gerardo Sauri, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México, aclaró que de retirar los textos se violentaría no sólo la Convención de los Derechos de la Infancia, ratificada por México en 1990, sino la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, "al impedir a los menores ejercer su derecho a la información, a la protección de su salud y a una educación integral".
Señaló que en las recomendaciones del Comité de los Derechos del Niño de la Organización de Naciones Unidas, presentadas en junio pasado, se establece como obligaciones vinculantes para el Estado mexicano, "fortalecer la educación sexual y reproductiva para los adolescentes, especialmente en escuelas públicas, con objeto de reducir las incidencias de embarazos en adolescentes y enfermedades de transmisión sexual".
Por ello, consideró que retirar los textos sería incumplir con la normatividad nacional e internacional, y con ello, "la SEP o cualquier autoridad competente estaría incurriendo en un delito por negarse a impartir un programa escolar en el que se aborda información sobre sexualidad".
Agregó que es "preocupante" que los grupos que se oponen al uso de los textos educativos sean "precisamente de estados donde no existe una normatividad estatal que proteja los derechos de la infancia, como Yucatán, Baja California, Puebla, Guanajuato, Veracruz, Oaxaca, Tlaxcala, Nayarit y Querétaro".
Activistas y sexólogos aseguraron que las autoridades no pueden ceder ante la presión de "grupúsculos oscurantistas" para impedir que se incluyan en los programas y textos temas vinculados con la sexualidad, pues "buscan imponer una moral individual sobre un mandato constitucional".
Señalaron que de concretarse cualquier violación al derecho a la información de los menores, presentarán una denuncia penal contra cualquier autoridad federal, estatal o municipal que "incumpla su responsabilidad de proteger los derechos de los niños".