Mercenarios en Irak se quejan de la falta de mujeres y fiesta
Bagdad . "Sin mujer, cerveza y fiestas" es la vida en Irak, lamentó un ex militar peruano ahora convertido en mercenario, al resumir el sentir de sus más de mil colegas, entre compatriotas y chilenos, que prestan sus servicios en la zona verde de Bagdad, el sector ultraprotegido de la capital iraquí. Los mercenarios sudamericanos se ocupan de salvaguardar las instituciones iraquíes y las embajadas estadunidense y británica de los continuos atentados que sufre el resto de Bagdad. Ex soldados, de entre 25 y 40 años, los mercenarios sudamericanos proceden en su mayor parte de zonas rurales pobres. Casi todos tienen sangre indígena y algunos inclusive no hablan inglés. Su primer "enemigo" es el calor, el segundo el aburrimiento y el tercero la falta de mujeres.