Para consolidar el teatro de marionetas el titiritero debe preparase mejor, asegura
Los títeres se han convertido en una elaborada expresión artística: Converso
El director del primer centro de estudios del género destaca el interés de los jóvenes
Ampliar la imagen Festival de marionestas gigantes en Bellas Artes Foto: Alfredo Domínguez
Ampliar la imagen Función de títeres durante un festival en Guanajuato Foto: Archivo
El teatro de títeres se ha convertido en una expresión artística que integra diferentes lenguajes. En la actualidad se presentan espectáculos complejos con marionetas hechas mediante diversas técnicas, así como actores que utilizan máscaras o títeres que incluyen danza y otros medios, como videos.
Así lo señaló el actor, dramaturgo y director de teatro especializado en títeres y máscaras Carlos Converso, quien desde hace más de un año dirige el primer Centro de Estudios en el Arte de los Títeres, AC, que se ubica en Jalapa, Veracruz.
"Los títeres se han convertido en una expresión elaborada de carácter artístico. Ya no es la tradicional imagen que teníamos del titiritero ambulante que llegaba con su teatrito y tres muñecos a presentarse en una plaza, aunque esto no debemos olvidarlo, porque se trata de algo popular."
En entrevista, Converso explicó que las nuevas compañías de títeres han logrado incrementar el número de espectadores, pues presentan espectáculos para niños y adultos; esta última es una vertiente relativamente nueva.
Carlos Converso, Premio Rosete Aranda 2005, señaló que el teatro de títeres ha cambiado porque las nuevas propuestas ayudan a despertar la imaginación olvidada y ya no es un espectáculo sólo para público infantil.
A decir del director y dramaturgo, para que "se consolide el teatro de títeres, se necesita mayor preparación de los titiriteros porque tradicionalmente el titiritero tenía una formación de carácter autodidacta, precisamente porque no había escuelas. Casi era un aprendizaje familiar que se transmitía de padres a hijos.
"Hoy en día se ha vuelto una expresión más compleja en la que se requieren recursos y conocimientos en artes plásticas, materiales, técnicas cinematográficas o video, y por supuesto de arte dramático."
En opinión de Carlos Converso, "detrás de un buen titiritero hay un buen actor porque finalmente un titiritero lo que hace es construir y animar un personaje, darle el carácter necesario mediante el movimiento y la voz".
Asimismo enfatizó que para eso se requiere formación, y por supuesto, contar con mayor apoyo económico de las instituciones para que este tipo de expresión artística sea autofinanciable.
Carlos Converso subrayó que es falsa la idea de que manipular un títere es sencillo: "Hay una especie de malentendido, pues el teatro de títeres tiene el estigma de arte menor frente a otras manifestaciones artísticas, pero en realidad requiere la misma preparación y rigor que cualquier disciplina".
Abundó que en algunas áreas es más complejo porque se necesita manejar un lenguaje codificado. Para ejemplificar mencionó que "cualquier error que exista en la animación del muñeco se evidencia de manera muy clara, y éste es un error difícil de salvar en escena".
El dramaturgo señaló que en Jalapa sucede un fenómeno interesante con el teatro de títeres, ya que muchos estudiantes de teatro de la Universidad Veracruzana han mostrado interés por la escuela de títeres.
"Se ve en sus propuestas esta combinación del lenguaje que realizan con los títeres y los actores, donde incluyen músicos en vivo o profesionales de la danza."
Al menos en Jalapa, agregó Converso, hay interés principalmente de los jóvenes por el teatro de títeres, pues al centro que dirige asisten a los cursos profesores y muchos jóvenes interesados en aprender la profesión de titiritero, sea para montar espectáculos específicos o como una expresión más en obras teatrales.
Al referirse a la primera escuela de titiriteros, Carlos Converso explicó que "la idea es atender dos líneas fundamentales; la primera consiste en ofrecer talleres y cursos para las personas involucradas en la educación de áreas artísticas.
"Otra vertiente es que la escuela funcione para todas las personas interesadas en esta disciplina de manera profesional o gente que ya está en las artes escénicas y le agrada la propuesta artística."
A casi dos años de su creación (en septiembre de 2004), la escuela de títeres imparte talleres y cursos en áreas específicas. El año pasado ofrecieron un diplomado sobre el lenguaje del títeres y este año habrá el diplomado De la idea a la materia, para experimentar mediante exposiciones teóricas y prácticas escénicas.
Los interesados en inscribirse o en apoyar al Centro de Estudios en el Arte de los Títeres pueden consultar la página web: www.escueladetiteres.com.