No pagó a proveedor por la construcción de un puente
Embargan a Naucalpan por una deuda de $43 millones
La empresa Unión Presforzadora embargó ayer por la tarde una cuenta bancaria y la caja general de la tesorería de Naucalpan para hacer efectivo el pago de una deuda de 43 millones de pesos, luego que el gobierno de dicha demarcación perdió el juicio mercantil 497/2003-1, que la constructora inició en 2003 para exigir la liquidación de un puente vehicular en la avenida Primero de Mayo.
Igor Trujillo Cenic, apoderado legal de Unión Presforzadora, explicó que la deuda era de 55 millones de pesos y había sido heredada por las últimas dos administraciones municipales. La ex alcaldesa panista Angélica Moya Marín -quien concluyó funciones el jueves anterior- adelantó la semana pasada un pago de 12 millones de pesos, monto que no cubre ni los intereses y los costos legales.
Trujillo Cenic dijo que este martes fue cumplida la orden de embargo y destacó que el primer síndico, Carlos Camacho Calderón, se opuso a la colocación de sellos y a ceder la posesión de una cuenta en el banco HSBC, hecho que será notificado a autoridades judiciales para que apliquen sanciones.
El embargo tomó por sorpresa al nuevo edil, José Luis Durán Reveles, quien se negó a atender a los abogados de Unión Presforzadora y a la actuaria ejecutora del juzgado séptimo, Silvia González Rabelo, quien dio fe del cumplimiento del embargo, efectuado a las 15:23 horas.
El alcalde dijo desconocer los pormenores de la orden judicial y reconoció que la sentencia tenía que cumplirse, pero ''antes debe observarse que haya capacidad de pago''.
El gobierno de Naucalpan ofreció pagar con distintos predios del patrimonio municipal, pero los bienes fueron rechazados por la empresa por no estar valuados ni desincorporados.
Ex alcalde de Jiquipilco se llevó ''hasta las cortinas''
La nueva administración de Jiquipilco, municipio ubicado 50 kilómetros al noreste de Toluca, tomó posesión con las arcas vacías, numerosas deudas y laudos a punto de cumplirse, sostuvo el alcalde entrante Carlos Sánchez Sánchez, del Partido del Trabajo, quien aseguró que su antecesor, el priísta Pablo Sánchez Dávila, ''se llevó hasta las cortinas''.
Carlos Sánchez indicó que, a cinco días de entrar en funciones, su administración se encuentra ''atada de manos'' y con amenazas de más de 200 trabajadores que exigen renovación del contrato. Comentó que la nómina del ayuntamiento tiene más de 650 personas, a pesar de que el municipio tiene apenas 12 mil habitantes, lo que le hace suponer que al menos un tercio de los empleados cobra sin laborar.
El ex dirigente estatal del PT destacó que ya integra un expediente ''amplio'' con todas las irregularidades que dejó Sánchez Dávila para entregarlo al Organo Superior de Fiscalización antes de que se cumplan 30 días de la toma de posesión y se pueda actuar contra los responsables de malos manejos.