Rechaza mayoría de estadunidenses que su país sea más seguro que antes del 11-S
Libre, turco-alemán detenido en Guantánamo; no se le comprobó acusación de terrorismo
Berlin, 24 de agosto. El ciudadano turco-alemán Murat Kurnaz, detenido desde hace cuatro años y medio en la base estadunidense de Guantánamo, fue puesto en libertad porque no pudo probarse su presunta participación en actividades terroristas, al tiempo que la mayoría de los estadunidenses rechazó que su país sea más seguro que antes del 11 de septiembre de 2001, según sondeo de CNN.
A altas horas de esta noche, el Ministerio del Exterior alemán confirmó el regreso de Kurnaz. Previamente hubo "intensas conversaciones con la administración estadunidense", pero no trascendió más información porque se acordó confidencialidad.
Kurnaz fue detenido en 2002 en Pakistán, meses después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, bajo sospecha de pertenecer a Al Qaeda.
Durante su detención no se pudo probar su participación en actividades terroristas. Kurnaz nació en Bremen en 1982 y posee sólo la nacionalidad turca.
Su abogado señaló que el joven de 24 años aterrizó durante la noche en la base de la fuerza aérea estadunidense en Ramstein.
'"Estados Unidos no desea mantener a detenidos por más tiempo del necesario", indicó el Pentágono en una declaración, al tiempo que afirmó que quedan unos 450 detenidos en Guantánamo, y que 120 serán liberados o enviados a sus países de origen.
Por su parte, la mayoría de los estadunidenses rechazó que su país sea actualmente más seguro que antes del 11 de septiembre, reveló una encuesta de CNN, divulgada pocos días antes de que se conmemoren cinco años de esa tragedia.
El sondeo indicó que 32 por ciento de los estadunidenses cree que su país es igual de seguro y 25 por ciento que es más inseguro que antes de los ataques de 2001. Por el contrario, 43 por ciento cree que Estados Unidos es más seguro actualmente.
Por lo menos 54 por ciento dijo estimar probable que se produzca un acto de terrorismo en Estados Unidos en las próximas semanas, según el sondeo de CNN.
En tanto, los 12 pasajeros de nacionalidad india de un vuelo de Northwest Airlines detenidos el miércoles en Amsterdam por manifestar comportamiento "sospechoso" serán liberados luego de haber sido declarados inocentes de la acusación de terrorismo, anunció la Procuraduría de Haarlem, al oeste de Holanda.
Los pasajeros eran sospechosos de intento de acto de violencia poniendo en peligro la seguridad abordo del avión. Los 12 hombres serán liberados, indicó la fiscalía.
A su vez, la justicia estadunidense anunció el arresto en Nueva York de un paquistaní que presuntamente ofrecía la cadena de televisión de Hezbollah por su empresa de distribución de televisión por satélite.
Según un comunicado de la fiscalía federal del distrito sur de Manhattan, Javed Iqbal, de 42 años, proporcionaba mediante su pequeña empresa HDTV, con sede en Brooklyn, el canal Al Manar, propiedad de la milicia chiíta, considerada por Washington una organización terrorista.
En tanto, un sector del aeropuerto internacional de Miami fue brevemente desalojado por la alarma que desató un paquete sospechoso, que resultó inofensivo, indicó un portavoz del aeropuerto.
Mientras, Mardin Azad Amir, inmigrante iraquí en Estados Unidos, generó alarma en el aeropuerto de Chicago. Antes de abordar el avión a Turquía Amir debió pasar su equipaje por el control de seguridad.
Una agente, intrigada por la forma de un artefacto, preguntó al hombre de qué se trataba. Visiblemente avergonzado, ante la presencia de su madre y sus pequeños hijos, el hombre balbuceó la palabra bomba, lo que generó la histeria en la terminal aérea.
Azad compareció ante un tribunal, y aseguró que es "normal" viajar con una bomba de vacío para pene ya que, según él, "la mitad de los estadunidenses la utilizan".
El juez señaló que el joven podría ser inculpado por "conducta desordenada" con el propósito de alterar el orden público. Si es encontrado culpable, se enfrenta de uno a tres años de prisión.
A todo esto, una célula militante islámica desbaratada por las fuerzas de seguridad de Marruecos estaba equipada para llevar a cabo ataques mayores a los perpetrados en Casablanca en mayo de 2003 y que dejaron 45 muertos, informó ese país.