Ahmadinejad reta a Bush a un debate televisivo
Irán rechaza petición de la ONU de detener su programa nuclear
Ampliar la imagen Ahmadinejad llega a la conferencia de prensa. A su derecha, el retrato del ayatola Jomeini Foto: Ap
Teherán, 29 de agosto. El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, rechazó hoy oficialmente la petición del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) de que ponga fin a su programa de enriquecimiento de uranio al señalar que "ya pasó la época que los cinco más uno utilicen el consejo como instrumento", y retó al presidente George W. Bush a un debate televisivo, propuesta que fue rechazada por la Casa Blanca y calificada de "ridícula".
"La república islámica dejó clara las cuestiones en su respuesta al paquete de propuestas. La explotación de la energía atómica es un derecho del pueblo iraní. El pueblo ha elegido su camino en virtud de las leyes y del derecho internacional. Nadie puede impedírselo", dijo Ahmadinejad.
Los cinco más uno son Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, China y Rusia, los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, más Alemania.
El presidente ultraconservador iraní reiteró que su país "no es amenaza para ningún país, ni siquiera para el régimen sionista (Israel). Lo que tengo que preguntar es si estarían dispuestos a abrir sus instalaciones nucleares a los ojos de los periodistas".
Durante una conferencia de prensa, indicó que "algunos no deberían creerse comunidad internacional. El mundo tiene 6 mil millones de habitantes y 190 países, sin embargo algunos quieren utilizar la victoria en la Segunda Guerra Mundial para imponer su voluntad a los demás, pero deberían saber que esa época ya pasó e incluso lo que está plasmado en el papel no surte efectos por el comportamiento que estas naciones tienen".
El mandatario afirmó "que los dos o tres países dotados de privilegios traídos por el viento de la guerra mundial no deberían tenerse a sí mismos como equivalentes de la comunidad mundial", en alusión a Estados Unidos y Gran Bretaña.
Al referirse a la resolución aprobada en el Consejo de Seguridad de la ONU en la que se le exige a Irán que suspenda el programa de enriquecimiento de uranio antes de finales de agosto, Ahmadinejad dijo: "El Consejo de Seguridad en lugar de ser utilizado para establecer la paz en Líbano, es usado contra nosotros".
Por otro lado, el líder iraní retó a Bush a debate televisivo. "Sugiero mantener un debate televisivo en vivo para conversar sobre asuntos mundiales y las formas de resolver esas cuestiones".
En tanto, Washington instó a Teherán a revaluar su rechazo al plazo impuesto por la ONU para finalizar las actividades de enriquecimiento de uranio y desestimó la propuesta del mandatario iraní de realizar un debate televisivo con Bush.
Si Irán ignora el ultimátum, el Consejo de Seguridad impondría sanciones y esto "seguramente tendrá impacto en el país", advirtió el portavoz del Departamento de Estado, Tom Casey, quien consideró ridícula la propuesta de realizar un debate televisivo con el jefe de la Casa Blanca.
Por lo pronto, París se mostró dispuesto a reanudar el diálogo con Teherán sobre su programa nuclear cuando faltan dos días para que expire el ultimátum del Consejo de Seguridad de la ONU.
Mientras, el jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld, indicó que su país lucha contra "un nuevo tipo de f ascismo", y afirmó que "esto es lo importante de esta larga guerra (contra el terrorismo) en la que cualquier confusión moral o intelectual sobre quién o qué es correcto y o equivocado puede debilitar la habilidad de las sociedades libres de perseverar", al aludir a los detractores de la "guerra contra el terror", de Bush.
Rumsfeld confirmó los comentarios hechos a principio de mes por Bush de que su país está "en guerra contra los fascistas islámicos", tras descubrir un presunto complot para bombardear aviones civiles.