Usted está aquí: domingo 3 de septiembre de 2006 Política En materia diplomática, al foxismo sólo le importó EU

En vez de acuerdo migratorio sólo se logró un muro

En materia diplomática, al foxismo sólo le importó EU

En cuanto a derechos humanos quedan muchos pendientes

MARIANA NORANDI

Aunque en materia de relaciones internacionales y diplomáticas el último Informe de Vicente Fox hace énfasis en la ratificación o incorporación de México en tratados y acuerdos bilaterales y multilaterales, a lo largo de los seis años de esta administración las relaciones diplomáticas de México han girado en torno de un solo tema: Estados Unidos.

La migración como eje de las relaciones bilaterales desde el punto de vista social, y la apertura extralegal de porciones de la industria energética nacional, como en el caso de Pemex, han dejado de lado otros temas, como el cumplimiento de la Constitución, los acuerdos internacionales y las relaciones con otros países, particularmente en el caso de Cuba y de países del Cono Sur. "Por nuestra ubicación geográfica y vecindad, el espacio natural de nuestra relación se enfoca en América del Norte", dice el Informe.

A pesar de las promesas de campaña de hace seis años, y los encuentros con el presidente estadunidense George W. Bush, nunca se logró un acuerdo sobre migración y, al contrario, el vecino país construyó un muro de metal de 595 kilómetros de largo para impedir el ingreso de indocumentados mexicanos a su territorio, donde, además de morir de sed y hambre por las condiciones del terreno, son perseguidos por agrupaciones civiles armadas y una cada vez más numerosa tropa del Servicio de Inmigración y Naturalización.

"El gobierno de México continuó promoviendo, a través de canales diplomáticos conducentes, la creación de un nuevo marco migratorio bilateral, que permita una migración segura, legal, ordenada y respetuosa de los derechos humanos".

En el documento se informa que México cubrió el adeudo con Estados Unidos en las asignaciones de agua del río Bravo acordadas en el tratado de 1944, "con lo que se resolvió uno de los principales temas contenciosos de la agenda bilateral que llevaba más de 12 años en la mesa de discusión".

Lo que para el gobierno foxista ha representado un saldo de cuentas con los estadunidenses, ha sido un punto de discusión con los ganaderos y agricultores de la región fronteriza, que aún no comprenden cómo, en épocas de sequía, les privan de agua para entregársela a sus vecinos del norte.

En materia de derechos humanos, el Informe hace una amplia relación de todas las iniciativas que México ha presentado en organismos internacionales; sin embargo, no hace referencia a los saldos pendientes que tiene dentro del país, como en el caso de las muertas de Juárez y las agresiones en San Salvador Atenco, casos que, inclusive, la Organización de las Naciones Unidas solicitó esclarecer.

 
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