Aún existen importantes oportunidades extractivas en nuestro país: Adán Oviedo

Descarta Pemex que pugna poselectoral afecte sus programas estratégicos

Asegura el funcionario de la paraestatal que están blindados en términos presupuestales

ISRAEL RODRIGUEZ ENVIADO

Cancún, QR., 2 de septiembre. Los conflictos poselectorales no afectarán los programas estratégicos de Petróleos Mexicanos (Pemex) porque están "blindados" en términos presupuestales, debido a que los planes no se preparan de un mes a otro sino que contemplan un horizonte de al menos 10 años, aseguró el subdirector de la coordinación técnica de exploración de la paraestatal, Adán Oviedo Pérez.

El funcionario de Pemex Exploración y Producción (PEP) explicó que las actividades a desarrollarse en 2007 fueron planeadas desde 2002 y "estamos seguros" que con el nuevo gobierno los planes seguirán su curso normal, y la decisión electoral del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación no afectará las actividades de Pemex.

"Obviamente es un gran debate a nivel nacional, en el que todos como ciudadanos estamos pendientes, estamos participando y tendremos una opinión, pero las actividades operativas de la petrolera no creo que deban detenerse y vayan a ser afectadas por esta discusión nacional que existe en el país".

Falta por explorar aguas profundas del Golfo de México

En términos operativos, el responsable de las actividades exploratorias de Pemex informó que para los próximos años existen importantes oportunidades exploratorias, aunque reconoció que una limitante son los equipos de perforación que se tienen contratados.

Adán Oviedo, uno de los técnicos más reconocidos a nivel nacional e internacional, informó que en México las oportunidades extractivas son todavía muy importantes debido a que sólo 25 por ciento del territorio nacional susceptible de contener hidrocarburos ha sido explorado. De este porcentaje, la mayor parte se ha hecho en tierra y una pequeña parte se ha realizado en mar, como es Campeche y la Faja de Oro en Poza Rica, Veracruz, pero todo el resto de la plataforma continental y el área de aguas profundas del Golfo de México, que en su conjunto suman alrededor de 400 mil kilómetros cuadrados, apenas se está empezando a explorar.

Precisó que de los 54 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente que se estima posee México todavía por descubrir, alrededor de 60 por ciento se encuentra en aguas profundas y el otro 40 por ciento en tierra y en aguas someras con tirantes de agua de 0 a 500 metros de profundidad. La mayor parte se localiza en las cuencas del sureste, como Chiapas, Tabasco, la sonda de Campeche y también una buena parte del área de Lankahuasa y la Faja de Oro marina.

De acuerdo con los planes de inversión de Pemex presentados el pasado 28 de junio de este año, la empresa requerirá de 15 mil 600 millones de dólares para 2007, y de éstos, 77.8 por ciento se destinaría a PEP, es decir, 12 mil 100 millones de dólares.

Sobre la opinión de algunos expertos en el sentido de que no hay premura para ir hacia aguas profundas del Golfo de México porque hay un enorme potencial en tierra, Oviedo Pérez reconoció que se esta explorando y se están encontrando nuevos yacimientos. Pero aclaró que por la naturaleza de esas áreas, que han sido exploradas desde hace 100 años, los grandes volúmenes de hidrocarburos ya se encontraron. "Vamos a seguir encontrando pero en volúmenes menores, por eso la necesidad de desarrollar proyectos como el de Ku Maloob Zaap, Crudo Ligero Marino y el Complejo Bermúdez, que nos van a permitir compensar la declinación de Cantarell".

Sin embargo, advirtió que esos proyectos "nos darán un respiro" para compensar la caída de la producción del principal yacimiento en México, Cantarell, sólo por un periodo máximo de seis años. Por ello, indicó, es necesario empezar a explorar para buscar las reservas en aguas profundas, que en caso de encontrarlas y su posterior explotación pasará un periodo de no menos de 6 años.

Entonces, dijo, estamos apenas a tiempo de empezar a hacer esa exploración e inversión para pensar en un posible desarrollo hacia 2012, si es que nos movemos con suficiente oportunidad y contamos con los niveles suficientes de inversión para desarrollar esa reserva.

Entrevistado en el contexto del primer Congreso y Exposición Internacional del Petróleo en México, Oviedo reveló que actualmente Pemex ha localizado en las provincias geológicas del Golfo de México 250 oportunidades y 32 prospectos.

Plan alterno en caso de no prosperar alianzas estratégicas

Adán Oviedo, informó que en caso de que no prosperen iniciativas para un cambio en el actual marco jurídico para permitir las asociaciones estratégicas con las compañías petroleras internacionales para incursionar en aguas profundas, Pemex está obteniendo de las compañías de servicio la tecnología convencional que está en el mercado.

Mencionó que el tema es tan importante que el propio director general de Pemex, Luís Ramírez Corzo, mantiene estrecha comunicación con el Congreso para informar sobre la importancia de realizar adecuaciones que permitan acuerdos con las empresas petroleras extranjeras. "Cualquier iniciativa que se tenga que tomar en el futuro será bajo el marco regulatorio vigente".

El plan alternativo de Pemex esta constituido por tres líneas de acción: "Pemex hace inversiones en el corto plazo para mantener la producción; en el mediano, para restituir reservas cercanas a las áreas productivas y puedan explotarse rápidamente, y en el largo plazo para invertir en reservas por descubrir y que puedan incorporarse y explotarse".

Explicó que en caso de que se tenga una restricción legal o presupuestal para ir a aguas profundas, siempre están vigentes los proyectos de corto y mediano plazo que se van a seguir operando.

Pero el único problema, añadió, es que las necesidades de hidrocarburos las vamos a seguir alargando y va a llegar un momento en que puede ser una circunstancia de riesgo para la empresa retrasar las actividades exploratorias. "Tenemos que empezar a trabajar en el presente para asegurar el futuro petrolero del país'', destacó. Hasta la fecha, ''tenemos un colchón de cinco a seis años, y si no, tendremos un futuro muy complicado''.