México SA
Lo bueno, lo malo y lo peor
Bien guardadas, las cifras sobre la pobreza
Ampliar la imagen
Ayer el presidente Vicente Fox encabezó la ceremonia de clausura y apertura de cursos en los planteles del Colegio Militar
Foto: María Meléndrez Parada
Entre los autoelogios que el gobierno del "cambio" recurrentemente se hace destaca el relativo a la "solución" y "reducción" de la deuda pública. "Ya no es problema; lo logramos; cumplimos", suele escucharse en el micrófono oficial.
Finaliza el sexenio, y las propias cifras oficiales descalifican la propaganda de los jilgueros del "cambio", e indican exactamente lo contrario. Desde Los Pinos se difunde la "gran reducción" de la deuda externa, pero no se oye una sola palabra sobre el explosivo crecimiento del débito interno; se promociona el pago adelantado en moneda extranjera, pero nunca se menciona que ese hoyo se tapa abriendo otro.
En fin, lo bueno es que ya se van; lo malo que llegarán otros peores. Lo cierto es que la silenciosa estadística oficial que nunca es utilizada por el gobierno federal advierte sobre el 118 por ciento de incremento en el saldo de la deuda interna del sector público a lo largo del sexenio foxista, mientras por el lado del débito externo se documenta una reducción de 15 por ciento, una diferencia de ocho a uno, obvio es que a favor del primero de los renglones referidos.
El primero de diciembre de 2000, el saldo de la mencionada deuda interna se aproximó a 574 mil millones de pesos; a julio de 2006, rebasaba un billón 256 mil millones. Por el lado externo, las cifras oficiales indican un movimiento a la baja de 77 mil 661 a 64 mil 855 millones de dólares.
Así, la deuda interna se incrementó en casi 60 mil millones de dólares y la externa se redujo en 12 mil 800 millones, lo que arroja un incremento real en el débito público (hasta julio de 2006) de casi 47 mil 200 millones de dólares en el sexenio foxista, sin incluir la llamada "deuda contingente" que incluye todo tipo de "rescates", "salvamentos" y cortesías gubernamentales (de antes y ahora) que han exprimido, exprimen al erario.
Aún así, la sonrisa no se le quita al gobierno del "cambio", y por medio de la Secretaría de Hacienda recientemente informó al Congreso que el saldo de la deuda interna neta del gobierno federal se ubicó, al cierre de julio, en un billón 201 mil 100 millones de pesos, monto superior en 17 mil 800 millones al registrado al cierre de 2005. La variación de los saldos se explica por un endeudamiento neto de 158 mil 800 millones, ajustes al alza de la deuda indexada a la inflación por 2 mil 600 millones, y una acumulación de disponibilidades por 143 mil 700 millones.
Por lo que toca a la deuda externa neta del gobierno federal, el saldo se ubicó en 53 mil millones de dólares, cifra inferior en 900 millones a la observada el 31 de diciembre de 2005. Este resultado se explica por un desendeudamiento neto por 5 mil 800 millones y ajustes contables al alza por 900 millones. Los activos financieros denominados en moneda extranjera presentaron una disminución de 4 mil millones.
En lo que corresponde al saldo de la deuda interna neta del sector público federal (gobierno federal, organismos y empresas y banca de desarrollo), al concluir julio se ubicó en un billón 256 mil 600 millones de pesos, un incremento de 6 mil 600 millones respecto al saldo registrado al cierre de 2005. Ello obedece a un endeudamiento interno neto de 114 mil 400 millones, ajustes contables al alza por 28 mil 800 millones de pesos y un aumento en las disponibilidades del sector público federal por 136 mil 600 millones.
Por su parte, el saldo de la deuda externa neta del sector público federal se ubicó en 64 mil 900 millones de dólares, monto inferior en 900 millones de dólares al registrado al cierre de diciembre de 2005. Este resultado corresponde a un desendeudamiento externo neto de 3 mil 600 millones de dólares, ajustes contables al alza por mil 700 millones y una disminución en las disponibilidades del sector público federal por mil millones.
En otro orden, la propia Secretaría de Hacienda informó al Congreso que en julio las finanzas públicas registraron un déficit de 3 mil 900 millones de pesos, resultado que está "en línea con la meta de equilibrio en el balance autorizada para el ejercicio". El balance primario, definido como el ingreso total menos el gasto distinto al costo financiero del sector público, registró un superávit de 19 mil 100 millones de pesos.
Los ingresos presupuestarios mostraron un incremento real anual de 21.9 por ciento. En este resultado influyó, principalmente, el crecimiento real de los ingresos petroleros de 22.7 por ciento y de los ingresos tributarios de 32.5 por ciento. El gasto neto presupuestario mostró un incremento de 45.2 por ciento anual en términos reales.
¿Y las cifras sobre la pobreza? Guardaditas bajo mil candados.
Las rebanadas del pastel:
Con la mesa puesta y el manjar a punto, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación hoy le pondrá la cereza al amargo y costosísimo pastel que el sistema le regala a su nuevo gerente, el microscópico de las manos sucias... Dice Juan Camilo Mouriño que no se negocia la "victoria", pero ¿no cambiaría de opinión si le ofrecen más gasolineras para su Grupo Energético del Sureste?