El dramaturgo fue distinguido con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2006
Más que político, el problema del país es cultural: Luis de Tavira
Con el galardón se reconoce al teatro y a la comunidad dedicada a cultivar ese arte, celebra
Deplora que ''la educación sentimental de la población se le haya dejado a la televisión''
Ampliar la imagen Luis de Tavira, ayer, durante la conferencia magistral Dilemas de la pedagogía del arte de la actuación, que impartió en el Museo de la Ciudad de México Foto: Yazmín Ortega Cortés
''Las políticas culturales en el país suelen partir de una idea errónea de lo que es cultura y, por tanto, de lo que es educación. La cultura no es un uso burgués prescindible en tiempo de crisis, ni una manifestación folclórica convertible fácilmente en mercancía", dijo ayer a La Jornada, el director del Centro Dramático de Michoacán (Cedram), Luis de Tavira, quien fue distinguido anteayer con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2006 en la categoría de Bellas Artes.
En entrevista con este diario, respecto del galardón que le otorgó el Estado mexicano, manifestó: ''Me siento muy honrado, me alegra muchísimo un reconocimiento al teatro, que es un arte colectivo; entiendo en este reconocimiento, un reconocimiento a la comunidad teatral''.
El dramaturgo explicó que la cultura es un indicador de la vida espiritual y que los acontecimientos actuales en la sociedad mexicana son producto del abandono que ha tenido la educación artística de la población, no sólo de los artistas.
''La educación sentimental de la sociedad se le ha dejado a la televisión comercial, que produce esos culebrones infumables y melodramáticos, donde todo es bueno o malo. Todo es así porque no se nos ha enseñado a pensar", apuntó De Tavira.
Estamos perdiendo a México
Para Luis de Tavira, la caída en la intolerancia y en la división es el principal problema del país, ''antes que un hecho político, se trata de un hecho cultural".
A su modo de ver, agregó el director de teatro, ''es un problema de cultura antes que de economía, porque la población ya no cree en su nación; si emigra no lo hace solamente por problemas económicos, lo hace porque ya no cree en su nación y no cree en sus instituciones, prefiere ir a buscar otras condiciones. Estamos perdiendo a México''.
Expresó que ''la prioridad más urgente del país es cultural, ya que la pérdida de confianza en México, en el ánimo y estilo propio, nos está convirtiendo en un país de migrantes".
Para revertir esa situación, De Tavira propone un cambio radical, tanto del Estado, los legisladores y la sociedad misma, en su valoración acerca de lo que es la cultura.
''Los mexicanos no están migrando simplemente por un problema económico, que es innegable, pero la solución del país no está en recetas y fórmulas económicas solamente; no se puede pensar en el desarrollo social del país sin pensar antes en el sujeto del desarrollo", reiteró el director de obras como Felipe Angeles y El caballero de Olmedo.
El teatro es un derecho social
En entrevista, De Tavira explicó que no todo es cultura en el país, también hay destrucción de la cultura.
''De lo que tenemos que hablar es de acción cultural y esto es responsabilidad del Estado, es responsabilidad de la sociedad y de los artistas."
Subrayó que el teatro es un derecho social, es una necesidad de la sociedad, y los hacedores del teatro deben asumir que su tarea es un servicio público.
En opinión del director del Cedram, la globalización del arte es una falsedad, porque lo que en principio debería ser una ventaja se ha convertido en el imperio del sistema mercantil, donde no existen países y valores, sino sólo aquellos que cotizan en la bolsa.
El gran reto para el desarrollo del teatro, planteó De Tavira, es conseguir las condiciones de estabilidad que son las únicas que pueden propiciar el desarrollo, esto implica la descentralización, la profesionalización, es decir, salir al encuentro del nuevo espectador del teatro.
''El teatro de nuestros días vive un profundo dilema para encontrar su lugar en la sociedad contemporánea y en nuestro país de manera especial.
''Sabemos que 90 por ciento de sus habitantes nunca ha ido al teatro, no lo conocen y la manera de comprender lo que hacemos tiene que cambiar radicalmente", señaló.
Espectáculo inspirado en Mozart
Durante la conferencia magistral Dilemas de la pedagogía del arte de la actuación, impartida ayer en el Museo de la Ciudad de México, Luis de Tavira explicó que la relación entre educación y arte sólo es comprensible en su dialéctica, al mismo tiempo. ''La expresión más acabada de lo que sería la meta de la educación es lo que llamamos el arte, pero el arte es también objeto de la educación".
El director del Cedram adelantó que a finales de este mes presentará un espectáculo basado en una comedia musical de Mozart, en el que intervienen un director de escena, actores, cantantes y bailarines.
La obra es una coproducción del Conservatorio de las Rosas, de Morelia, y el Cedram, de Pátzcuaro, y se estrenará en el Teatro de las Artes.