Exigen investigar presuntas arbitrariedades en penales
ONG: en menos de dos meses, tres reos muertos en Chiapas y 2 en Tamaulipas
San Cristobal de las Casas, Chis., 11 de septiembre. El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas denunció la muerte de un interno en el penal El Amate, ocurrida el domingo, con lo que suman dos los fallecimientos de manera "sospechosa" en ese lugar y tres en la entidad, en menos de dos meses.
Blanca Martínez Bustos, directora del organismo, pidió a las autoridades estatales que se abra una investigación para determinar las causas de estas muertes "sospechosas", pues las víctimas están bajo la custodia del estado.
Mediante un comunicado de prensa, el gobierno de Chiapas informó que el reo Orley López, de 61 años de edad, presuntamente se ahorcó en su celda del mencionado Cereso, ubicado en el municipio de Cintalapa.
El pasado 22 de julio, el indígena tzo-tzil Jesús Hernández Pérez falleció en el reclusorio de un paro cardiaco, según la autopsia. Sin embargo, la familia de la víctima rechazó la versión.
"Algo anda mal en el penal que están ocurriendo estas muertes sospechosas, que según las autoridades son por causas naturales o por suicidios", señaló Martínez Bustos.
"Desde hace varios meses hemos denunciado actos de hostigamiento, torturas y otras violaciones a los derechos humanos que se cometen en El Amate, pero las autoridades correspondientes se niegan a investigar, deslindar responsabilidades y castigar a los responsables", afirmó.
Sostuvo que el sistema de seguridad en los reclusorios y la procuración de justicia en general están en crisis, por lo que es urgente hacer una reforma para garantizar el respeto a los derechos humanos de los prisioneros.
Dijo que los hechos deben ser un llamado de atención para que intervengan organismos internacionales, a fin de frenar la impunidad.
La directora del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas recordó que hace un mes otro reo murió en manos de policías municipales de Chiapa de Corzo, con lo que suman tres los casos de fallecimiento de personas que estaban bajo la custodia del estado.
Por ello consideró que existen elementos suficientes para que la Fiscalía General del estado abra una investigación contra las autoridades de El Amate y se finquen responsabilidades por las arbitrariedades que ocurren.
Si las autoridades no investigan incurrirán en "encubrimiento y se volverán cómplices de las violaciones que frecuentemente ocurren" en dicho penal, advirtió.
En Matamoros, Tamaulipas, en los últimos 15 días han sido asesinados dos reclusos del Cereso local, mientras otro reo permanece en el área de terapia intensiva del Hospital Universitario de Monterrey, Nuevo León, al que fue trasladado de urgencia.
La víctima del homicidio más reciente, ocurrido el sábado pasado, fue Domingo Lázaro Pérez, encarcelado el jueves pasado por presunto robo. Su cadáver fue hallado esposado de los pies y la mano izquierda a una reja del área de observación, con golpes en cuerpo, cara y cráneo. Según exámenes practicados por la Unidad de Servicios Periciales, tenía el cuello fracturado. El alcaide del penal, Inocencio Almazán, y el jefe de custodios, Antonio de León Julián, aseguraron que Domingo se golpeó contra la pared y él solo se provocó las lesiones.
Este crimen se sumó al ocurrido el 29 de agosto, cuando el interno José Quezada Gallegos, de 25 años de edad quien pereció tras ser torturado con choques eléctricos en el área de transformadores, donde cumplía un castigo corporal debido a que días antes golpeó a un guardia de seguridad.
Luz María González Armenta, activista del organismo no gubernamental Defensa y Promoción de los Derechos Humanos Emiliano Zapata, afirmó en entrevista que a estos dos asesinatos se suma el caso del convicto Hugo César Mejía, a quien se llevó al Hospital Universitario de Monterrey con quemaduras de tercer grado en 80 por ciento del cuerpo, provocadas por un agresor no identificado, que lo roció con gasolina y le prendió fuego.
Con informacion de Julia Antonieta Le Duc, corresponsal