Critican que no se haga nada ante el rezago educativo
El gobierno de Fox no garantizó una buena enseñanza: expertos
El informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que sitúa a México en el último lugar de los países miembros en donde los jóvenes concluyen el bachillerato, sólo ratifica que durante el gobierno de Vicente Fox se apostó a una "calidad de papel" y renunció a su función de garantizar una buena enseñanza para todos, advirtieron especialistas.
Además condenaron que la Secretaría de Educación Pública (SEP) no asuma la responsabilidad y se quede tan tranquila sin decir qué hacer frente a los magros resultados en el rubro.
El investigador del Centro de Estudios sobre la Universidad (CESU) de la UNAM, Angel Díaz Barriga, expresó que si en verdad se quiere enfrentar el problema, ya es hora de poner un alto a los intereses políticos que privan en el sector, puesto que en el nuevo contexto, la presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), "Elba Esther Gordillo, cuenta con una capacidad de influencia como nunca la tuvo Carlos Jonguitud o ninguno de sus antecesores" porque "Felipe Calderón le debe la Presidencia".
En entrevistas por separado, el también ex director del CESU se refirió al informe de la OCDE en el que destaca que este país mantiene un desequilibrio en su inversión educativa que acaba por favorecer a las clases con mayores recursos. En principio, destacó que la administración foxista no supo, pero tampoco quiso, entrar a la importancia de la parte pedagógica para sacar adelante el proyecto de modernización de la educación superior, que es la que impulsa el desarrollo de estrategias de aprendizaje y de preparación de los docentes.
Pero por otro lado, sólo apostó al "cambio formal" que únicamente da importancia a indicadores como el número de doctores, de publicaciones, etcétera, lo que tampoco ayuda a dar cuenta de lo que sucede en el salón de clases. De hecho, dijo, éste "sigue siendo el gran desconocido de las políticas educativas".
Díaz Barriga observó que durante esta administración se reforzó la idea "de una calidad de papel", es decir, de la elaboración de documentos para después participar en una bolsa de recursos, lo que tampoco se traduce en que la escuela cuente con las condiciones tecnológicas y de apoyo pedagógico para trabajar.
De manera que un sistema como el educativo, tan complejo, diverso, desigual, con tantas exigencias y deficiencias en la formación y el desempeño de los profesores requiere, en principio, de un diagnóstico minucioso y plural: "Ya basta de alabanzas y de decir que tal proyecto que hizo el grupo fulano es el bueno. Es necesario encontrar un mecanismo para recabar la opinión de maestros, de padres, de especialistas" y, por otro lado, revisar la cuestión del SNTE, a quien no le ha importado la educación, puesto que su interés sólo es el de "amarrar" alianzas de poder.
Por su parte, la profesora-investigadora de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), Etelvina Sandoval, manifestó que los resultados de la OCDE ratifican que en esta administración no hubo un proyecto claro para la enseñanza.
Lejos de desarrollar un modelo coherente desde la educación básica hasta la superior, se impulsaron proyectos publicitarios. Hoy, añadió, el resultado es la agudización de la pirámide educativa, en la que hay una gran cantidad de jóvenes expulsados muy pronto del bachillerato y otros tantos que ni siquiera pueden entrar. Así, la pirámide se hace más chica hasta llegar a la universidad.
"Pero ya basta de que a cada momento se acepte que salimos mal en los exámenes nacionales, internacionales y que todo el mundo diga lo mal que estamos, y nadie asuma su responsabilidad". Incluso, señaló que los propios resultados del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) tampoco los toma en cuenta la SEP para reorientar la educación.
Por ello, hasta se levanta la sospecha de que sólo salen este tipo de informes para que después salgan con el argumento -como se ha hecho en otros sectores para favorecer al capital privado- de que "hace falta una buena inversión privada".