Más saludable, comer pescados grasos: estudio
Chicago, 20 de septiembre. Un grupo de mujeres suecas que consumió al menos una vez por semana pescados grasos, como salmón, caballa y arenque, registró un riesgo mucho menor de desarrollar cáncer renal que las consumidoras de pescado magro, indicaron investigadores.
El estudio de 15 años de duración reveló que quienes consumían regularmente pescado con altos niveles de aceite rico en ácidos grasos omega-3 y vitamina D tenían 74 por ciento menos riesgo de sufrir cáncer de riñón que quienes no ingerían pescado.
Las variedades magras como el atún, el bacalao y los peces de agua dulce no confirieron el mismo beneficio.
Comparado con el pescado magro, el graso tiene hasta 30 veces más cantidad de ciertos ácidos y un nivel hasta cinco veces mayor de vitamina D.
"El nombre pescado graso quizá asuste a algunas personas, pero este tipo de grasas son saludables, por lo que recomendaría comer pescado graso, no magro, ya que se pueden obtener muchos más beneficios", manifestó Alicia Wolk, del Instituto Karolinska, en Estocolmo.
Más calorías, pero mayores beneficios
"El pescado graso, por definición, tiene también más calorías, pero sus beneficios son insoslayables", agregó Wolk.
Los investigadores, que publicaron los resultados de su estudio en Journal of the American Medical Association, no indicaron si el pescado graso prevendría otros tipos de cáncer.
De las más de 61 mil mujeres de entre 40 y 76 años que participaron en la investigación, 150 desarrollaron cáncer de riñón.
En Estados Unidos existe un riesgo de contraer cáncer renal de uno en 77, y se prevé que 39 mil estadunidenses serán diagnosticados con la enfermedad este año, según datos de la Sociedad Americana del Cáncer. La dolencia es dos veces más común en hombres que en mujeres.
Reuters