No desmiente el mandatario de EU la supuesta amenaza de bombardear Pakistán
Reafirman Bush y Musharraf sus "estrechos vínculos" antiterroristas
Fue "tomado por sorpresa" por la revelación del paquistaní a CBS, dice el presidente estadunidense
Informa el gobernante asiático que publicará un libro sobre el tema, por eso no puede dar detalles
Ampliar la imagen El presidente estadunidense responde preguntas de los periodistas. A la izquierda, el gobernante paquistaní Foto: Ap
Washington, 22 de septiembre. Los presidentes de Estados Unidos, George W. Bush, y de Pakistán, Pervez Musharraf, reafirmaron este viernes sus "estrechos vínculos" en la "guerra contra el terrorismo", pero sin desmentir o confirmar las afirmaciones del gobernante visitante de que Washington amenazó con bombardear a su país tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 si su gobierno no cooperaba con la lucha contra el terrorismo internacional.
Bush declaró en una conferencia de prensa conjunta tras la reunión de ambos en la Casa Blanca, que fue "tomado por sorpresa" ante la entrevista de CBS en la que el presidente de Pakistán afirmó que Estados Unidos amenazó con bombardear esa nación asiática a finales de 2001.
El mandatario republicano dijo que se enteró del asunto por primera vez "al leer la prensa" del viernes, pero no negó que haya habido amenazas a Pakistán.
Musharraf, quien llegó a la presidencia de su país mediante un golpe militar, afirmó el pasado jueves que Estados Unidos amenazó con bombardear su país y regresarlo a "la edad de piedra" a menos que cooperara en la "guerra contra el terrorismo".
"El director de inteligencia (paquistaní) me dijo que (el ex secretario de Estado adjunto estadunidense Richard Armitage) le había dicho: 'Estén preparados para ser bombardeados. Estén preparados para regresar a la edad de piedra'", afirmó Musharraf en el programa televisivo 60 Minutos, que será emitido el próximo domingo en Estados Unidos.
Niega Armitage la versión
El ex funcionario negó en entrevista con CNN este viernes, que haya amenazado con bombardear territorio de Pakistán. "No estaba autorizado a hacerlo", sostuvo, pero admitió haber hecho una serie de exigencias al gobierno paquistaní para asegurarse de que cooperara con la ocupación estadunidense de Afganistán.
Musharraf eludió este viernes el tema y explicó que el próximo lunes saldrá a la venta en Estados Unidos un libro en que hace referencia a esa información, y que no deseaba hacer comentarios antes de la publicación.
"Estoy moralmente obligado con Simon and Schuster (su editor) a no hacer comentarios sobre el libro hasta ese día", alegó el gobernante paquistaní.
"En otras palabras, lo que está diciendo es 'compren el libro'", bromeó Bush durante la conferencia de prensa.
El presidente de Pakistán desmintió además que el acuerdo de paz con los jefes tribales en la zona fronteriza con Afganistán fuera un pacto disfrazado con los rebeldes talibanes.
"Ese tratado no es un arreglo con los talibanes. Está destinado a combatir a los talibanes", declaró Musharraf a los periodistas.
El acuerdo fue severamente criticado por altos funcionarios estadunidenses que temen que el gobierno paquistaní haya sido demasiado conciliador y que, por consiguiente, los rebeldes afganos encuentren más fácilmente refugio en las zonas fronterizas.
Para finalizar, el presidente Bush aseguró que Estados Unidos está preparado para jugar cualquier papel en los esfuerzos de India y Pakistán para resolver la disputa por Cachemira, si es invitado por estos países.
Musharraf había informado al mandatario estadunidense de su reciente acuerdo con el primer ministro indio, Manmohan Singh, para retomar las negociaciones por el diferendo en Cachemira, suspendidas luego de una serie de atentados en Bombay.
El territorio de Cachemira es compartido por las dos naciones, pero ambas reclaman su totalidad. Ese enclave ha sido objeto de tres guerras desde 1947, y al menos 44 mil personas han muerto desde la insurgencia fundamentalista en Cachemira india, en 1989.