La solución deben buscarla los involucrados, opina Creel
El Senado en modo alguno atraerá el problema: Beltrones
El presidente del Senado de la República y coordinador de la fracción priísta, Manlio Fabio Beltrones Rivera, aseguró ayer que esa cámara ''de ninguna manera atraerá conflictos de carácter político, como el de Oaxaca, mismo que el gobierno federal no ha sido capaz de resolver'', y recordó que hay una solicitud del Congreso del estado para que la Federación se aboque a la solución del conflicto.
En tanto, el coordinador de los senadores panistas, Santiago Creel Miranda, destacó que el tema Oaxaca será analizado por la Comisión de Gobernación, una vez que ésta se constituya el próximo jueves. La solución al conflicto en esa entidad, dijo, ''le corresponde a los actores involucrados; tienen que llegar a una negociación muy rápida, porque el problema está derivando en situaciones de violencia que afectan a la ciudadanía''.
Creel Miranda lamentó los hechos suscitados el pasado domingo en ese estado y señaló: ''Todos debemos rechazar la violencia; ésta es inaceptable aunque las demandas que se persiguen sean legítimas; es reprobable este medio que se utiliza para conseguir soluciones''.
Insistió el panista en que a la demanda de desaparición de poderes, presentada por el magisterio oaxaqueño y organizaciones que integran la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO), se le va a dar el trámite parlamentario, es decir, la desahogará la Comisión de Gobernación.
En tanto, el senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Ricardo Monreal Avila, se manifestó por una salida política para Oaxaca, entidad en la que se ha recrudecido la violencia y la convivencia está totalmente alterada. ''Oaxaca no puede seguir ante la indiferencia y la apatía, es un asunto clave para la vida de la nación.''
Deploró el perredista que a casi un mes de haberse iniciado las sesiones en el Senado, y luego de mes y medio de haberse elaborado un dictamen negativo a la demanda de la APPO y del magisterio sobre la desaparición de poderes, ''era previsible que la crisis subiera de tono ante la indiferencia del gobierno y la apatía de los senadores del PRI y del PAN; no puede ser que hayan obstaculizado la creación de una comisión para resolver este asunto tan delicado''.
Una salida a ese problema, dijo, es que ''el gobernador Ulises Ruiz Ortiz solicite licencia por tiempo determinado, y luego la vuelva a renovar hasta que presente su solicitud por tiempo indefinido y el PRI continúe gobernando la entidad. Esa podría ser una solución''.
El también perredista René Arce Islas, integrante de la comisión de senadores y diputados de PRD, Convergencia y Partido del Trabajo que realizó una visita a Oaxaca el pasado fin de semana, dijo que en general existe una preocupación muy grande en todos los sectores por lo que ocurre en ese estado, que repercute en su economía, en su tejido social y en la confrontación.
Dicha comisión se entrevistó con religiosos, empresarios, políticos, gobierno, organizaciones civiles, el magisterio, la APPO, y lo que todo mundo propone, dijo el senador Arce, es ''ya una salida al problema oaxaqueño''.
También, todo mundo está consciente de que este conflicto viene de agravios muy fuertes que tienen que ver con el desarrollo de Oaxaca, con la miseria, pero ningún actor social pidió la utilización de la fuerza pública para resolver esta crisis, sino demandan una salida política y rápida, dijo Arce.
Señaló que en ese estado hay un problema estructural que tiene que ver necesariamente con políticas de desarrollo, ante lo cual ''la salida del gobernador Ulises Ruiz es un asunto menor''.
Después de entrevistarse con los actores sociales, el perredista dijo que ''la polarización y el enfrentamiento están a flor de piel; lo que pasó el domingo puede repetirse en cualquier momento e inclusive acarrear consecuencias todavía más graves, por eso urge una solución integral al problema de Oaxaca''.
Ahí hay tensión permanente y ''la entrada de la fuerza pública no resolvería el problema o lo llevaría a todos los rincones del estado, donde hay condiciones muy delicadas de violencia social y política que se podrían cruzar con algún otro tipo de violencia que harían que esa entidad se convirtiera en un verdadero conflicto para la República, donde lo que ocurrió en Chiapas podría ser cosa menor''.
Arce abundó que en ese estado operan grupos del narcotráfico y lo que hay que evitar es que ''la violencia se cruce por todos lados y ponga en riesgo gravísimo la estabilidad social''.