El científico fue quien identificó el virus junto con Luc Montagnier
Desarrolla Robert Gallo una vacuna potencial contra el sida
El equipo dirigido por el especialista en la Universidad de Maryland creó anticuerpos que atacan cierto número de cepas diferentes del VIH, algo esencial para brindar protección
Maryland, EU, 25 de septiembre. El científico que descubrió el virus del sida hace más de 20 años informó el pasado jueves que ha desarrollado una vacuna potencial contra la enfermedad que ha causado la muerte de 25 millones de personas en el mundo.
El profesor Robert Gallo, primero en identificar que el VIH causaba el sida, junto con el científico francés Luc Montagnier, expresó que su reciente descubrimiento lo ha hecho sentirse más optimista que en toda la década pasada de que es posible vencer la enfermedad.
Casi 40 millones de personas viven con VIH, sobre todo en el Africa subsahariana, y casi cuatro millones más se infectan cada año. Una vacuna que detenga su propagación es el santo grial de los investigadores, pero pese a 20 años de esfuerzos y a millones de dólares invertidos todos los intentos han fallado.
Gallo, director del Instituto de Virología Humana de la Universidad de Maryland, indicó que su equipo ha creado anticuerpos que trabajan contra cierto número de cepas diferentes del VIH, esenciales para que una vacuna otorgue protección efectiva, lo cual ha desafiado intentos anteriores.
La candidata a vacuna ha sido probada con éxito en cuatro simios, seleccionados por su similitud con el hombre, y ahora se realizan pruebas en otros 12. Si también dan resultado, el siguiente paso será probar la vacuna en humanos, explicó.
Gran avance clínico
"Sí, estamos en etapa preliminar, pero si hace 10 años hubiera sabido que podría producir anticuerpos que neutralizaran una amplia gama de variantes del VIH, habría organizado un festejo. Se creía que era imposible. Es un gran avance clínico y lo hemos hecho en silencio. No sé cuál será el resultado del último intento (en los 12 simios), pero mi previsión es que avanzaremos a la fase uno de las pruebas clínicas (en humanos) en el curso de un año. Antes no había un camino; ahora hay un poco de luz", agregó.
Desarrollar una vacuna contra el sida se considera uno de los retos más difíciles que enfrenta la medicina, y algunos lo creen imposible. El virus muta con rapidez, se integra al material genético de los pacientes e infecta las mismas células que el sistema inmune utiliza para defender al organismo del ataque.
Gallo señaló que el enfoque adoptado por su equipo fue modificar la envoltura protectora del virus, abrir un sitio y producir anticuerpos que eviten la entrada del virus en las células del organismo. Pero el primer desafío de los investigadores es que los anticuerpos no duran más de tres meses, lo cual significa que se requeriría una dosis masiva de vacuna tres o cuatro veces al año. "Si podemos superar esa dificultad, estaremos a punto de emocionarnos", comentó.
Existen 15 cepas principales de VIH, pero la mezcla y recombinación ha producido unas 20. La que domina en Africa es la A, mientras la prevaleciente en Estados Unidos y Europa es la B. Sin embargo, de cada cinco personas infectadas con la cepa B sólo una sería protegida por una vacuna B, a causa de las variantes en las cepas.
"En lo personal -manifestó Gallo- me siento más optimista, pero no quiero exagerar. El VIH siempre da sorpresas. Veo una avenida, pero no sé si detrás de una curva vamos a encontrar un camión que nos obstruya el paso."
Thomas Hanke, especialista que trabaja en vacunas para el sida en la unidad de inmunología humana de la Universidad de Oxford, en Gran Bretaña, advirtió: "Ha habido montones de descubrimientos de vacunas que pueden neutralizar distintas cepas, pero aún no se ha elaborado una vacuna útil. El éxito del doctor Gallo es una buena razón para abrigar sentimientos positivos, pero también para no emocionarse más de la cuenta".
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya