Falta competitividad a la industria química: Economía
Hoy, desgravación de 6 mil insumos y bienes de capital, pese a oposición
La Secretaría de Economía formaliza hoy el decreto de desgravación de 6 mil insumos y bienes de capital para 18 sectores productivos del país, con lo que busca reducir costos, evitar la triangulación y el contrabando y atraer la inversión; esto, a pesar de la oposición de los industriales químicos que alegaron un daño por la medida de la dependencia.
De los 6 mil aranceles que la Secretaría de Economía reducirá para importar productos de países con los que México no tiene tratados comerciales, sólo mil 300 pertenecen al sector químico o petroquímico, y el resto a 17 sectores, como el de cuero-calzado, que serán beneficiados con la reducción de costos, aseguró el coordinador de asesores de la dependencia, Gabriel Padilla.
Puntualizó que los industriales químicos del país se oponen a la reducción arancelaria porque se ubica dentro de los que no han trabajado en mejorar su competitividad. Aseguró que desde que México empezó su integración a la economía global y a los mercados internacionales mediante su red de tratados comerciales la señal para los sectores fue muy clara: la reconversión era indispensable.
Economía ha apoyado aproximadamente 30 programas de competitividad para sectores como el de cuero-calzado, textil-confección, fibras y de las maquiladoras, entre otros; sin embargo, en el caso de la industria química, explicó el funcionario, hubo algunos acercamientos, pero nunca se concretó algo.
Aseveró que, a pesar de las críticas vertidas por los industriales químicos hacia la desgravación de 6 mil fracciones arancelarias para insumos y bienes de capital, se trata de una medida que reducirá costos, integrará a la mayoría de las pequeñas y medianas empresas que forman parte de la cadena productiva, atraerá la inversión y permitirá evitar prácticas desleales de comercio como la triangulación y el contrabando.
Precisó que la reducción arancelaria no será a tasa cero, sino que en promedio será de 2.5 por ciento, al pasar de aranceles de 11.4 por ciento a 9.7 aproximadamente, con lo que, admitió, será posible que los propios sectores nacionales compren insumos más baratos, pero también tener un mayor control sobre importaciones que representen un riesgo para la industria nacional y recurrir a las medidas de protección válidas como las cuotas compensatorias o salvaguardas.
Padilla señaló que la desgravación arancelaria es producto de una serie de análisis y consultas hechos con el fin de no favorecer sólo a las grandes empresas, sino integrar a todos los eslabones de las cadenas productivas sin poner en riesgo los márgenes de la industria.
En el caso del sector químico, explicó, se trata de una industria "muy concentrada, con la que estamos de acuerdo en que es necesaria la aprobación de las reformas estructurales, de tener energéticos a mejores precios", pero de no hacerse la desgravación de mil 300 fracciones sólo se beneficiaría a algunas grandes empresas.
Lo que queda claro en este caso, puntualizó, es que el sector químico requiere de un nuevo planteamiento de política industrial, reconversión productiva e integración de eslabones.
Entre los opositores más férreos a esta medida, por considerar que habrá una severa pérdida de empleos e inversiones, está la Asociación Nacional de la Industria Química, algunos de cuyos integrantes son Protexa y las filiales en México de 3M, BASF, Bayer, Celanese, Dupont, Procter & Gamble.