Ayer fueron inauguradas por el jefe delegacional, Armando Quintero

Cuenta la población de Iztacalco con dos nuevas salas de arte

Presentarán cine y teatro; se denominan Paco Ignacio Taibo I y Juan de la Cabada

ERIKA DUARTE

Desde ayer unas 60 mil familias residentes de las cuatro colonias centrales de Iztacalco -las de mayor densidad de población en la demarcación- cuentan con un nuevo espacio para la recreación cultural, con la apertura de dos salas de arte en calles de la colonia Cuchilla Ramos Millán.

Al inaugurar la obra, que tuvo una inversión de 5.5 millones de pesos, el jefe delegacional, Armando Quintero, expresó que ése fue uno de los proyectos fijados al inicio de su gestión, porque "es una injusticia social que en la delegación no existan espacios para la recreación".

Señaló que aún se requieren más espacios para la cultura, y confió en que el próximo jefe delegacional, Erasto Ensástiga, privilegiará la obra social.

"Sé que Erasto seguirá concretando proyectos culturales, ya que en estas zonas populares se requiere cultura y recreación para disminuir los niveles delictivos", subrayó.

Indicó que la demarcación presenta el segundo lugar en deserción escolar, y 30 por ciento de las averiguaciones previas están relacionadas con violencia intrafamiliar, en tanto que la densidad poblacional es de 4.15 personas por metro cuadrado.

Las dos salas recién inauguradas en ese espacio de recreación llevan los nombres de los escritores Paco Ignacio Taibo I y Juan de la Cabada, respectivamente; tienen capacidad para 250 personas cada una.

Por su ubicación, en el lugar hay una importante afluencia de jóvenes, toda vez que se encuentra cerca de una primaria, una secundaria y un plantel de educación técnica.

La mañana de ayer la sala Juan de la Cabada se estrenó con una proyección de cine infantil, mientras que en la Paco Ignacio Taibo I un grupo de jóvenes presentó la obra teatral ¡Qué vergüenza!, que invita a reflexionar sobre el rechazo social a las personas contagiadas con sida.

Al término de la obra, el escritor Paco Ignacio Taibo I anunció que cederá los derechos de sus obras Los cazadores, Morir un poco y La quinta parte de un árbol, para su puesta en escena en dicha sala, tras lo cual recibió una ovación de los asistentes.

El inmueble será administrado por la delegación como un espacio comunitario en el que se cobrarán cuotas mínimas, las cuales serán fijada por la Secretaría de Finanzas de la ciudad, únicamente para garantizar el mantenimiento del lugar y las condiciones de seguridad en el entorno.

Los fines de semana se proyectarán matinés infantiles y por las tardes películas apropiadas para jóvenes y familias; también se proyectará cine de arte, además de la puesta en escena de obras de teatro con contenido social.

Respecto de los horarios, entre semana se prevé que abran por la tarde, mientras que por la mañana podrían funcionar como auditorios al servicio de los planteles públicos que se encuentran a su alrededor, indicó el jefe delegacional, Armando Quintero.

Gloria Rodríguez Alonso, de 55 años, fue una de los asistentes que la mañana de ayer colmaron la sala Paco Ignacio Taibo I.

Indicó que le gusta ir al cine y al teatro, sin embargo "hacía mucho tiempo que no veía una obra". Se congratuló de que se haya abierto este espacio en su colonia, y sobre todo "por ponerlo a nuestro alcance".

Por su parte, la joven Karma Benavides señaló que desde hace tiempo dejó de ir al teatro; "solía ir a uno en la colonia Santa María la Ribera, pero la falta de tiempo, la distancia y el poco dinero dificultan disfrutar de estos espacios".

Coincidieron en que es necesario crear más espacios donde todos, sin importar su clase social o nivel económico, puedan acceder a espectáculos culturales.

Agregaron que este tipo de espacios también requieren un programa de seguridad y vigilancia.

Muchos vecinos, al enterarse del estreno del lugar, decidieron hacer un paréntesis en sus actividades cotidianas para disfrutar de la primera obra que se presentó en la sala cultural, a la que, afirmaron, serán asiduos visitantes.