Demandan a Fox defender los derechos humanos de los connacionales
Unánime condena de diputados a la construcción del muro fronterizo
Los ocho partidos representados en la Cámara de Diputados expresaron su rechazo a la decisión del Congreso de Estados Unidos que aprueba la construcción de un muro fronterizo de mil 123 kilómetros entre ambos países, y anunció su respaldo del pronunciamiento del presidente Vicente Fox, quien demandó al mandatario estadunidense George W. Bush que no promulgue dicha resolución.
En uno de los pocos puntos de acuerdo aprobados por unanimidad en la presente legislatura, la Cámara de Diputados expresó su solidaridad con los 6 millones de mexicanos indocumentados que laboran en Estados Unidos, a los cuales, advierte, no se les puede tratar como delincuentes, sino que deben ser considerados trabajadores que contribuyen al desarrollo de ambos países.
Los diputados exhortaron al presidente Fox a que fortalezca las medidas diplomáticas que tengan como objetivo la defensa de los derechos humanos y laborales de los mexicanos residentes en Estados Unidos, y acudir a los tribunales de organismos internacionales para solucionar este diferendo.
Los legisladores advirtieron que la construcción de barreras físicas como la que aprobó el Congreso estadunidense lastima la relación bilateral. "El muro presenta una falsa salida al reto de la migración, ya que propicia el mercado negro de personas, altera el flujo circular de los migrantes y fomenta su estadía en Estados Unidos, además de que aumenta los riesgos de muerte de los migrantes al intentar nuevos cruces más peligrosos, entre otros efectos negativos, medidas que poco ayudan al espíritu de cooperación", establece el punto de acuerdo.
Reconoce también que el Estado mexicano debe asumir con mayor profundidad y eficacia la responsabilidad de trabajar "arduamente" con políticas sociales y de desarrollo regional para que los mexicanos no busquen en otros países las oportunidades laborales que en su patria no encuentran.
"Afirmamos que la respuesta integral al ordenamiento de los flujos migratorios no debe estar sujeta a la coyuntura política. La solución no se encuentra en el levantamiento de muros sino en la construcción de puentes que busquen el desarrollo de ambas naciones. Consideramos que los principios de seguridad de Estado, deben ser complementados con los valores que enmarcan la seguridad humana, porque resulta insuficiente y contradictorio intentar proteger las instituciones del Estado sin considerar el cuidado de las personas", advierte el texto.
Los ocho partidos representados en San Lázaro manifestaron su disposición a iniciar un diálogo abierto por medio de la diplomacia parlamentaria que permita lograr soluciones propicias en beneficio de ambas naciones
Los legisladores lamentaron que la repuesta a un problema que involucra a ambos países se haya reducido a la construcción de un muro y al uso de tecnología de punta, así como el reforzamiento de la Patrulla Fronteriza para pretender detener un fenómeno que debe encontrar soluciones en el ámbito de la cooperación bilateral.
En tanto, México espera efectivamente que el gobierno de Estados Unidos analice de manera cuidadosa las razones expresadas en la nota diplomática enviada por la decisión del Congreso de ese país para ampliar la construcción del muro fronterizo, y en la cual se solicita al presidente George W. Bush reconsidere la posición de firmar dicha legislación, señaló el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez. "Creo que lo que hemos hecho es un buen documento en el que se ha planteado de manera clara las razones por las que este muro no va a conducir ni a solucionar el problema de seguridad, ni tampoco a dar una ventaja a nadie que esté tratando de evitar que terroristas pasen entre México y Estados Unidos, y sí podría perjudicar en el largo plazo una relación de amistad y de una relación profunda de cariño entre dos países que se han querido y se quieren durante mucho tiempo y para los cuales esta valla sería un agravio", dijo el canciller en una entrevista radiofónica, tras conocerse que la Casa Blanca había señalado que la nota del gobierno mexicano sería analizada cuidadosamente.
Sin embargo, el mismo canciller reconoció que las posibilidades de que el presidente Bush vete dicha ley son "muy bajas", además de que el momento electoral que viven Estados Unidos es "muy complicado". De cualquier manera, nos parece importante no sólo que queden documentadas y planteadas las razones por las cuales creemos y estamos convencidos que la construcción de un muro fronterizo no es la solución.