Urgente, regular constitucionalmente a los medios: Dussel
Luego del papel que tuvo la televisión en el proceso electoral presidencial, el filósofo Enrique Dussel señaló la necesidad de elaborar una nueva Constitución en la que haya un capítulo dedicado a los medios de comunicación, pues en la actualidad no existe un articulado que garantice el derecho del ciudadano a la información veraz.
Explicó que se carece de tribunales que valoren si un medio de comunicación está cumpliendo con el derecho a la información que tiene el ciudadano, y tampoco hay mecanismos para impugnar la actuación de la televisión, la radio y la prensa cuando falsean la verdad.
Al participar en el coloquio El mundo del siglo XXI desde la crítica de la economía política, el catedrático de la UNAM destacó que los medios de comunicación se han convertido en un elemento fundamental para construir la política, y tal como operan en la actualidad constituyen instrumentos para imponer instituciones injustas.
Recordó que durante las recientes campañas electorales la televisión difundió promocionales "violentos, agresivos y llenos de inmoralidad" contra el candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador. En Brasil, el presidente Luiz Inacio Lula da Silva está enfrentando una estrategia del mismo tipo y podría perder la elección por esa causa, añadió.
En vista del papel que ha jugado la mediocracia, estimó necesario crear en una nueva constitución un capítulo dedicado a los medios, para que sean juzgados y puedan estar en manos del pueblo.
Durante su exposición dedicada a los movimientos sociales y al pueblo como las fuerzas históricas que pueden cambiar las instituciones, consideró que éstas son necesarias para la vida, pero inevitablemente se "fosilizan y llega un momento en el que hay que transformarlas".
Pero dicho cambio debe hacerse desde abajo y con la participación del pueblo, subrayó en coincidencia con el investigador José María Calderón Rodríguez, también de la UNAM, quien por su lado expuso que no hay otra manera de impulsar la transformación de las instituciones que no sea el trabajo de todos. De ahí que se requiera hacer asambleas en universidades, fábricas, barrios y dondequiera.
Puntualizó que los movimientos sociales surgidos en la globalización también deben ser globales, ir más allá de las fronteras de sus países y al mismo tiempo tienen que extender y profundizar su capacidad de explicación y anticipación teórica contra los movimientos del capital y su capacidad de reproducción.
Carlos Perzabal Marcué, investigador de la UNAM, se manifestó convencido de que con la participación ciudadana se podrá restaurar la República, lo que implica tener un Ejecutivo fuerte con liderazgo político-social, un Congreso plural, un Poder Judicial renovado y al servicio de la República, una Suprema Corte que dirima los conflictos políticos y sociales y partidos político con idearios y alejados de los vicios corporativos y clientelares.
Dussel se refirió a la pérdida de hegemonía que ha tenido el grupo en el poder en México y a que el consenso que tenía se ha transformado en un disenso.
Cuando se rompe la hegemonía se pasa a la dominación, en la que se reprime a la disidencia. Esta es la situación que ahora enfrenta el país, subrayó.