El derechista ha perdido apoyo entre electores socialistas y del sur de Brasil
Amplía Lula su ventaja sobre Alckmin a casi 12 puntos porcentuales, según encuesta
Rio de Janeiro, 11 de octubre. El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, amplió su ventaja a casi 12 puntos porcentuales sobre el socialdemócrata Geraldo Alckmin, su rival en la segunda ronda de los comicios presidenciales, que se celebrarán el 29 de octubre.
Acorde con un sondeo de opinión del Instituto Datafolha divulgado hoy, el índice de intención de voto para el socialista Lula da Silva, candidato del Partido de los Trabajadores, se elevó de 50 a 51 por ciento tras el primer debate por televisión del domingo pasado con Alckmin.
El índice de preferencias por Alckmin, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), bajó de 43 a 40 por ciento desde la encuesta anterior, el 6 de octubre pasado. Sin embargo, el socialdemócrata minimizó el resultado y sostuvo que "esos sondeos de opinión se equivocan".
El postulante del PSDB señaló que la campaña hacia la segunda ronda se iniciará en la práctica este jueves, cuando los dos candidatos presidenciales empezarán a difundir su propaganda política por radio y televisión, y confió en que en ese escenario va a crecer hasta la victoria.
Pero los datos divulgados por el Instituto Datafolha sugieren que, si las elecciones presidenciales se realizaran hoy, Lula recibiría 56 por ciento de los sufragios válidos, frente a sólo 44 por ciento del ex gobernador de Sao Paulo.
La encuesta, publicada hoy por el diario Folha de Sao Paulo, se basa en entrevistas a 2 mil 868 electores de 194 ciudades de todo el país, y tiene un margen de error de dos puntos porcentuales.
Según Datafolha, para los electores no se confirma el análisis de los analistas, que apuntaron a Alckmin como ganador del debate del domingo pasado.
La investigación reveló, además, que Alckmin ha perdido apoyo entre el electorado de izquierda, que en la primera vuelta votó por la senadora Heloisa Helena, del Partido Socialismo y Libertad.
Alckmin también perdió apoyo en la desarrollada región sur del país, mientras el apoyo a Lula se expandió en el empobrecido noreste brasileño.
En tanto, las propuestas de uno de los asesores de Alckmin de recortar gastos e imponer controles cambiarios le valió al candidato opositor críticas de ministros del presidente Lula y operadores de mercado, que le han restado credibilidad.
Lula comparó el proyecto neoliberal de su adversario con el de su predecesor Fernando Henrique Cardoso, que sólo se encaminaría a desmontar el aparato del Estado y con un ajuste fiscal lesionar a servidores del sector público, y penalizar a quienes ganan el salario mínimo.