Virgin Atlantic planea democratizar los vuelos mediante loterías o un reality show
Costará 200 mil dólares pasar seis minutos en el espacio
La nave tendrá una altitud de 140 kilómetros, los pasajeros podrán pasear por la cabina libremente en gravedad cero y observarán con claridad la Tierra y su atmósfera
Ampliar la imagen El catálogo navideño de la tienda Neiman-Marcus incluirá un viaje al espacio a bordo de esta nave que se exhibió a escala en Dallas. La oferta es para seis personas y una fiesta de bienvenida de cuatro días en la isla privada de sir Richard Branson, cuya ubicación no se dio a conocer Foto: Ap
Nueva York. Los pasajeros de los vuelos comerciales al espacio de Richard Branson tendrán seis minutos para dar volteretas libremente en gravedad cero y contemplar la fragilidad de la Tierra y su atmósfera antes de ajustarse nuevamente los cinturones para regresar al desierto californiano.
"El piloto ha apagado la señal de ajustarse los cinturones; ahora son libres de flotar por toda la cabina como deseen", escucharán los poseedores de los boletos de 200 mil dólares, mientras la nave espacial de la aerolínea Virgin Galactic alcanza una altitud de 140 kilómetros.
En una reciente conferencia de prensa, realizada en esta ciudad para mostrar el interior de la nave, Branson prometió que los pasajeros vivirán "la experiencia más intensa y maravillosa que jamás hayan tenido".
Para que personas comunes y corrientes tengan la oportunidad de viajar al espacio, el propietario de Virgin Atlantic planea "democratizar" los vuelos mediante estrategias, como organizar loterías públicas, redimir 3.2 millones de kilómetros acumulados al viajar por la aerolínea o participar en un reality show en televisión.
La primera de las cinco naves impulsadas por cohetes -tripuladas por dos pilotos y con capacidad para seis pasajeros- que Virgin tiene proyectadas se construye en el desierto de Mojave, y está programada para comenzar vuelos de prueba a finales del año próximo.
Su diseño se basa en el de la Nave Espacial Uno del pionero de la aviación Burt Rutan -primer vehículo construido por un particular que viajó al espacio, en 2004. Su impacto en el ambiente será limitado, pues encenderá sus cohetes al alcanzar una altitud de lanzamiento de aproximadamente 15 kilómetros impulsado por una nave llamada Caballero Blanco. Los pasajeros recibirán un entrenamiento de tres días y deberán someterse a un examen médico antes del viaje de dos horas y media.
Viaje apto para la mayoría
Branson aclaró que el diseño limita los efectos de las fuerzas gravitacionales en los pasajeros, así que se calcula que 80 por ciento de quienes quieran viajar estarán en condiciones de hacerlo.
Con asientos en forma de mitades de melón y relucientes interiores blancos salpicados de mirillas en paredes, piso y techo, la Nave Espacial Dos se parece a un pequeño aeroplano de pasajeros, pero no hay que esperar servicio completo a bordo: no habrá comida, sólo algunos productos para "asentar" el estómago y los intestinos en previsión de las enormes fuerzas gravitacionales que experimentarán los pasajeros.
Seguramente tampoco habrá quejas sobre ausencia de entretenimiento a bordo. "En los 45 años pasados, todos los astronautas han vuelto a la Tierra tratando de hallar la forma de explicar la enormidad de lo que han experimentado, y claramente su percepción ha cambiado", explica Branson. "Extender ese privilegio a todo tipo de personas es la ambición de Virgin desde hace mucho tiempo".
Virgin ha modificado sus planes de restringir mediante cinturones los movimientos de los pasajeros en gravedad cero, y todavía no es seguro que deban usar trajes presurizados. En cuanto a la vista, un vuelo espacial suborbital permitirá observar con claridad la curvatura de la Tierra y su delgada atmósfera, experiencia que -espera sir Richard- hará que más personas se involucren en el activismo en favor del ambiente.
El empresario, quien anunció que destinaría 3 mil millones de dólares de las ganancias del grupo Virgin al desarrollo de combustibles verdes, declaró que espera que, gracias a su diseño, la Nave Espacial Dos prácticamente no genere emisiones de bióxido de carbono. "La cantidad de energía que generan las naves de la NASA al despegar alcanzaría para iluminar Nueva York, pero hoy tenemos que echar mano de las nuevas tecnologías para asegurarnos de que la nuestra sea una nave espacial verde", dijo.
Casi 200 personas se han inscrito ya para los primeros vuelos comerciales, que podrían comenzar en 2009. Se prevé que los pasajeros deberán liberar a Virgin de responsabilidad sobre su seguridad; el equipo financiero ya está diseñando pólizas de seguro por dos horas y media para los viajeros, pero Branson indicó: "Antes de aceptar pasajeros comerciales habremos hecho más viajes al espacio que todos los realizados por la NASA en la historia de los vuelos espaciales, así que estaremos bien probados".
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya