DISQUERO

Lechucho el grande

¿Música exquisita? El track inicial de Lucumi, nuevo trabajo discográfico del maestrísimo cubano Jesús Chucho Valdés (Universal records) al piano solo, solito y su alma, contiene los ingredientes necesarios y suficientes para aspirar al paraíso: toque pianístico de titán, atmósfera plena, inspiración, empuje, arraigo y al mismo tiempo despegue, ignición, puesta en órbita. Sílabas amplias, aliento sinfónico a lo Keith Jarrett desde un simple, poderoso piano, respiración de marsupial.

Un embrujo desde los primerísimos instantes de este disco sensacional, cuyos siguientes tracks contienen ritmo y sabrosura, harto jícamo y tumbao. Toda el arpa de la caja del piano, todo el teclado, en acompasado diapasón, en esplendoroso florecer de clepsidras en hervor. ¿Qué más? Bueno: un martini. Esta música es como para disfrutarse con un buen martini. Suena el disco. La vida es bella. ¡Qué bonito es casi todo! Gran disco. Grandioso y lubricante.