Asarco quemó basura radiactiva en los 90: experta
Ciudad Juárez, Chih., 14 de octubre. En los años 90 la fundidora de metales Asarco (American Smelting and Refining Company) incineró en sus hornos ubicados a la orilla del río Bravo 247 envíos de basura radiactiva -más de 5 mil toneladas- proveniente de la Armada de Estados Unidos, denunciaron defensores del medio ambiente de El Paso, Texas, y Ciudad Juárez, Chihuahua, basados en documentos desclasificados por el gobierno del país vecino.
Mariana Chew, maestra en ciencias de la Universidad de Texas, en El Paso, y especialista en temas de contaminación ambiental, aclaró que Asarco quemaba esa basura radiactiva en forma clandestina, tanto en su planta de El Paso como en la que tiene en el estado de Montana, por lo que los desechos vertidos al ambiente siguen contaminando con plomo la sangre de la gente.
Los documentos mostrados por los activistas, que se oponen a que sea reabierta la empresa, indican que una gran parte de los productos peligrosos incinerados venían del arsenal militar que se encuentra en Denver, Colorado. La tronera de la empresa Asarco lanzaba las emisiones en ambos lados de la frontera y nunca se analizaron los desechos en forma independiente, dijeron.
Los jueces de la Comisión de Calidad Ambiental de Texas y de la Agencia de Protección al Ambiente de Estados Unidos, Ralph Márquez y Larry R. Soward, respectivamente, dirigidos por Kathleen Hartnett, darán a conocer en noviembre su decisión sobre la reapertura de la empresa fundidora.
Durante 24 años, hasta cerrar en 1999, Asarco recibió materiales desconocidos del Departamento de la Defensa de Estados Unidos, incinerados en la zona llamada Fin de Ciclo, a la cual sólo se accedía con permiso de los directivos. También se incineraron desechos de armas químicas traídos del estado de Utah.
Oficialmente se afirmó que el material llegó de 1989 a 1997 para ser incinerado, y que no era peligroso.