Juzgarán a 8 soldados de EU por matar a civiles iraquíes
Admite Bush que la violencia en Irak es comparable a la guerra de Vietnam
Ampliar la imagen El primer ministro iraquí Nuri Maliki (izquierda), se reunió ayer con el clérigo radical chiíta Moqtada Sadr en la ciudad de Najaf, para conversar sobre la violencia sectaria en el país Foto: Ap
Bagdad, 18 de octubre. Ocho soldados estadunidenses serán juzgados por una Corte Marcial bajo cargos de homicidio de civiles iraquíes en dos casos distintos, uno de los cuales está relacionado con la violación de una joven que luego fue asesinada junto a su familia.
A su vez, el presidente George W. Bush admitió este miércoles por primera vez que la creciente violencia en Irak puede compararse con la Guerra de Vietnam, en una entrevista con la cadena ABC News.
En tanto, se informó que cuatro de los soldados serán juzgados por la violación y muerte de la joven y su familia en la aldea de Mahmudiyah, sur del país, en marzo, y el resto por el asesinato de tres detenidos iraquíes durante un asalto a un supuesto campamento rebelde cerca de Tikrit, en mayo, de acuerdo con la orden emitida por el general Thomas Turner.
La Casa Blanca descartó que el aumento de la violencia en Irak, donde en un solo día, el pasado martes, murieron 10 soldados estadunidenses, lleve al presidente George W. Bush a cambiar su estrategia, la cual es ganar, y eso tiene un costo, señaló el vocero Tony Snow.
El ejército estadunidense anunció que perdió a 10 soldados en ataques rebeldes en las provincias de Diyala, Al Anbar y en esta capital. En lo que va del mes, 67 soldados han muerto, en uno de los balances más altos en lo que va del año.
El ex secretario de Estado James Baker, que preside una comisión especial sobre Irak creada por el Congreso, y que ayer describió la situación en Irak como "un desastre", va a proponer cambios en la estrategia de aquí a principios de 2007, y se estudian dos opciones: una retirada de las tropas por etapas, o la participación de Irán y Siria en un esfuerzo para detener los combates, señaló el diario Los Angeles Times.
El primer ministro de Gran Bretaña, Tony Blair, también reiteró ante el Parlamento de su país que no habrá cambios en su estrategia de mantener a las tropas británicas en Irak hasta que las fuerzas locales puedan garantizar la seguridad.
Dijo que sus soldados se retirarán progresivamente, pues lo contrario sería "desastroso", al tiempo que rechazó las críticas de la oposición de que la estrategia del gobierno "fracasó" mientras lo presiona para que la política sobre Irak vuelva a evaluarse.
El brigadier Ed Butler, comandante saliente de las fuerzas británicas en Afganistán, dijo ayer que la decisión de desviar fuerzas para invadir Irak costó años de avance en Afganistán, en una nueva crítica que hace un jefe militar británico al manejo de las guerras de ocupación en Afganistán e Irak.
En Bagdad, Mazen Saidi, un jefe del Ejército del Mehdi, del clérigo radical Moqtada Sadr, fue liberado a dos días de su detención por las fuerzas estadunidense tras la presión del primer ministro iraquí, Nuri Maliki, y de sus partidarios.
Maliki, además, se pronunció por una pronta sentencia a muerte de Hussein, cuyo juicio por la campaña militar Anfal de 1988 contra la minoría kurda en la región del Kurdistán, se reanudó hoy. Para el 5 de noviembre se espera un veredicto en el primer proceso contra Saddam por la matanza en el poblado de Dujail en la década de 1980.