La peruana y el Mariachi Vargas de Tecalitlán hicieron aflorar lo mexicano

Apoteosis de Tania Libertad en la clausura del Festival Cervantino

En las gradas, competencia entre gritos contra el ''fraude electoral'' y porras a la UNAM

ANA MONICA RODRIGUEZ ENVIADA

Guanajuato, 22 de octubre. Los gritos contra el fraude electoral a las afueras de la explanada de la Alhóndiga de Granaditas antecedieron al concierto de Tania Libertad y al mariachi Vargas de Tecalitlán en la clausura del 34 Festival Internacional Cervantino (FIC), que concluyó con una apoteosis de la cantante peruana, que hizo a los presentes sumergirse en los recuerdos.

Antes de la primera llamada para que se iniciara el espectáculo, que incluyó melodías de Pablo Milanés, José Alfredo Jiménez, Juan Záizar, José Angel Espinosa Ferrusquilla, Silvio Rodríguez y Armando Manzanero, por mencionar a algunos, los gritos se confundieron fuera y dentro del graderío. En el exterior se alzaban consignas en contra del fraude electoral, mientras el interior se sacudió en varias ocasiones con el estruendoso grito de guerra puma: "¡Goya, cachún cachún rara, cachún cachún rara, Universidad!".

Los jóvenes, que continuaron hasta la aparición de la intérprete con la sonora porra, ambientaron el lugar y como si estuvieran en el estadio México 68, organizaron olas de un lado a otro de la explanada. Lo cierto es que, fueran o no universitarios, ocuparon toda la parte superior del teatro al aire libre y en varios momentos del espectáculo se escuchó también el motivo de su masiva asistencia: ¡Te amo, Tania! ¡Gracias, Tania! y ¡Guanajuato te quiere!

En punto de las ocho de la noche, la cantante abrió el programa con la movida canción Ritmo de negros y a partir de ese momento comenzaron a difuminarse las consignas externas en que los manifestantes sostenían cartulinas donde condenaban "la imposición de Fecal", "Ratota" y "al traidor a la democracia", en referencia al presidente Vicente Fox. Se escucharon enseguida Historia de un amor, Procuro olvidarte y Gracias a la vida.

A mediodía, un incidente solitario ocurrió en el templo de la Valenciana, cuando una mujer inconforme con el proceso electoral sorprendió con sus consignas a la agrupación austriaca Academia Allegro Vivo y a los presentes en el concierto que se realizaba en el recinto religioso.

Pero en la noche, la imponente voz y presencia de Tania Libertad hicieron olvidar cualquier incidente y continuó con una selección musical que fue de lo romántico al bolero, del folclor latinoamericano a la trova cubana y terminó con temas de compositores de habla hispana. En especial, la cantante reconoció y homenajeó a Armando Manzanero por ser uno de los mejores en el mundo. Del autor yucateco cantó Por debajo de la mesa y Voy a apagar la luz, que merecieron sonados aplausos.

Enseguida hizo acto de presencia por primera vez en Guanajuato el Mariachi Vargas de Tecalitlán y lo mexicano salió a flote en la explanada del histórico recinto. Tras cantar La fiesta se sucedieron Tu recuerdo y yo, Cielo rojo, Echame a mí la culpa, El pastor, Serenata huasteca, Te perdono, Por ti, Ojalá y La bruja. También el mariachi interpretó sin la cantante varias piezas que propiciaron los gritos de la gente: Ella, Si nos dejan, La que se fue, El rey, entre otras.

Hacia al final del espectáculo Tania Libertad entonó a capella Alfonsina y el mar, y después Fina estampa y Qué bonita es mi tierra. Las dos últimas fueron a petición del público que solicitó una más a la intérprete, quien se unió al reconocimiento que la directora del FIC, Irma Gabriela Mini Caire, entregó a cargadores y estibadores que realizan el trabajo fuerte en el festival.

La versión 34 de la fiesta del espíritu cerró con multicolor pirotecnia que salió desde diferentes puntos de la ciudad cervantina para terminar su recorrido arriba de la Alhóndiga de Granaditas y dijo adiós a los invitados de Reino Unido y Chiapas. El próximo año la cultura, tradiciones y arte de China estarán en el escaparate guanajuatense junto con los de San Luis Potosí.