El equipo está encarrerado, celebra el técnico luego de tres triunfos

Tras la crisis tenemos los objetivos más claros, asegura Isaac Mizrahi

MARLENE SANTOS ALEJO

Importantes lecciones obtuvo el Cruz Azul de la "crisis de resultados", aseguró el técnico Isaac Mizrahi, quien destacó que "hoy los objetivos están más claros que antes" de entrar en ese bache de siete partidos sin triunfo, pues para salir a flote hubo "un porqué, un cómo"; es decir: "determinación, orden táctico y mucho corazón".

El tercer triunfo consecutivo, logrado el sábado ante Veracruz, confirmó la recuperación de La Máquina y la ubicó en el cuarto sitio general, en el umbral de la liguilla, etapa en que solía verse afectada por una baja de juego, misma que ahora desechan.

"Afortunadamente pasó en aquel momento, nos hizo tocar fondo, ahora vuelves a subir, pero crecimos como grupo y como personas; el equipo está encarrerado y con mentalidad triunfadora. Eso nos puede llevar (a la liguilla) por inercia", señaló el estratega cementero.

No obstante, Mizrahi descartó excesos de confianza, pues la clave será continuar con trabajo intenso, ya que siempre hay aspectos por corregir, "tenemos que estar muy concentrados para lo que sigue: Jaguares, Toluca y Santos".

Además, celebró la anotación de Miguel Sabah, quien llegó a nueve dianas, dos menos que el líder Bruno Marioni, ello a pesar de una lesión que lo alejó de las canchas. Al estratega le gustaría verlo alzarse con el título de romperredes, pero recalcó que la prioridad es el equipo y no logros individuales.

Ayer en La Noria hubo acceso al público y el novato Luis Orozco se dio vuelo con entrevistas, fotos y autógrafos dedicados a la prensa y a niños seguidores del equipo. Estaba feliz tras haber anotado ante los escualos su primer gol en el máximo circuito.

"Anotar en primera división es muy emocionante, pero lo más importante es que se ganó", señaló el sinaloense, quien agradeció la confianza del técnico y de sus compañeros. "Gracias a Dios (el tanto) cayó el sábado y esperemos que vengan muchos más", comentó.

El argentino Gabriel Pereyra fue otro jugador que se sinceró ante micrófonos y grabadoras; confesó haber pasado por una especie de baja de juego mezclada con falta de interés, "son momentos anímicos que uno pasa". Tuvo un diálogo con su técnico y hasta al banquillo fue a dar. Hoy se declaró motivado y contento en su posición de volante por la derecha.

"El torneo mexicano es muy parejo, antes el Veracruz pelea- ba por no descender y ahora tiene posibilidades de clasificar. El estadio se llenó gracias también a nuestros seguidores y ganarle a Jaguares será clave... Todos los equipos pueden estar peleando la liguilla, todos tienen ilusión de salir campeón", expresó Pereyra.