"Sí tenemos hambre, pero de justicia", afirman
Amagan los ayunantes con no ingerir líquidos
Están dispuestos a morir si no hay solución, advierten
Con el aval de un reporte médico en el que se indica un cuadro de "infecciones severas en vías respiratorias", "alteraciones gastrointestinales", "pérdida de peso corporal hasta de seis kilos", además de la presencia de "bacterias, virus y hongos", los 21 profesores y miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) que desde hace 10 días están en huelga de hambre a base de líquidos y azúcar advirtieron que de no existir solución favorable al conflicto radicalizarán su postura mediante la cancelación total de esos líquidos, "hasta llegar a la muerte en menor tiempo".
Hace 16 días llegaron a pie a la ciudad de México procedentes de Oaxaca. Se les veía cansados, pero a partir de su determinación de ayunar están visiblemente afectados físicamente. No hace falta la valoración médica para comprobar la pérdida de peso. Los huesos empiezan a marcarse en sus rostros.
Omar Olivera, uno de los ayunantes, comenta que quieren reinvindicar lo que es tomar en serio no comer nada. Dispuestos a lo que sea, dice que han visto cómo en este país todo se ignora y forma parte del paisaje, en este caso, urbano.
En tiendas de campaña frente al Hemiciclo a Juárez, donde erigieron un camposanto con un féretro y coronas de muerto "en honor" al gobernador Ulises Ruiz, están tendidos en el piso y envueltos con cobijas en espera de alguna buena noticia.
Con la cédula profesional 705310, el doctor Morsé Cornelio García, coordinador médico de los huelguistas, elaboró un reporte en el que señala que "por no haber ingestión de proteínas se presenta un cuadro de funcionamiento no óptimo neurocognoscitivo del sistema nervioso central" y "en el aparato cardiovascular por falta de ingestión integral hay deficiencia de algunas sales, las cuales pueden generar arritmia cardiaca o incluso algo letal". En el ámbito digestivo, indica que en cualquier momento podría presentarse un cuadro agudo "e incontrolable que va a producir hipotensión y muerte".
Miguel Linares, otro de los ayunantes, dice que ésta "no es una huelga más en el Distrito Federal" y sólo retrocederán "cuando Ulises Ruiz deje Oaxaca". Recordó al gobierno que es el pueblo quien pone y quita a los gobernantes.
Por su parte, Isauro Nava comentó que su determinación de continuar, incluso sin tomar agua, "no es prostituir" una medida, sino aumentar la presión para que el gobierno entienda lo que es el movimiento.
Maricarmen Altamirano dice que sí tienen hambre, pero "de justicia", y por esta razón las 21 personas que no ingieren alimentos han hecho el firme compromiso de "continuar hasta alcanzar nuestros objetivos".