Creciente cifra de choques de pájaros con aeronaves
Las aves y otros animales silvestres constituyen un problema creciente para la industria aeronáutica, en especial las especies aviarias que, en 2005, ocasionaron mil 100 colisiones y pérdidas económicas cuantiosas para las empresas aéreas. Sólo en los aeropuertos de Estados Unidos, ocasionaron siete mil, reveló la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
Según Richard A. Dolbeer, coordinador nacional del Programa de Seguridad y Asistencia Aeroportuaria del Ministerio de Agricultura del gobierno estadunidense, la multiplicación de la fauna silvestre obedece, básicamente, a "programas altamente exitosos" que reglamentan el uso de pesticidas, ampliación de los sistemas de refugios para la fauna y restauración de humedales, mismos que han auspiciado de manera indirecta el aumento de todo tipo de aves en las inmediaciones de las terminales aéreas.
Cita como ejemplos el aumento de la población no migratoria de los gansos de Canadá -que pesan entre tres y cinco kilos- que residen en Estados Unidos; mientras en 1990 sumaban un millón de palmípedos, en 2005 se cuantificaron 3.5 millones de ejemplares, y en el caso de los cormoranes de cresta doble -que pesan dos kilos en promedio-, de 1972 al año pasado, ese tipo de ave aumentó de 100 parejas nidificadoras a 130 mil.
195 muertos
Las colisiones de aves contra los motores de los aviones, según la OACI, han sido la causa del fallecimiento de 195 personas y la destrucción de 168 aeronaves desde 1988 a la fecha. En reporte hecho público en la revista de la citada institución de aviación civil el segundo trimestre de 2006, se dice que un investigador ha estimado que los choques con aves costaron a los transportistas aéreos comerciales "en todo el mundo", entre 1999 y 2000, mil 200 millones de dólares.
Con base en la información anterior, la organización aeronáutica recomienda a las autoridades aeroportuarias de cada país cumplir con las normas establecidas en materia de prevención contra el peligro aviario.
En especial solicita que se evalúe el grado del peligro planteado por los pájaros dentro y cerca de los aeropuertos; tomar las medidas necesarias "para disminuir el número de aves", y eliminar o impedir el establecimiento de cualquier sitio en la vecindad del campo aéreo "que pueda ser un atractivo para las aves y, por tal motivo, represente un peligro para la aviación.
Así, se menciona el uso de "diversas técnicas", como la instalación de redes, explosiones pirotécnicas, láser "e incluso patrullaje con halcones o perros amaestrados, a fin de excluir, dispensar o eliminar la fauna silvestre, en especial las aves, aunque también llegan a incursionar en las pistas de aterrizaje y alrededores, siervos y perros salvajes, que se sienten atraídos, al igual que los pájaros, por el césped y el espacio abierto para alimentarse y descansar".