Rechaza la secretaría apoyar a alguna de las partes
Fuentes de Gobernación contemplan retiro de la PFP la próxima semana
La Policía Federal Preventiva (PFP) permanecerá en Oaxaca "sólo durante el tiempo que sea necesario, porque no está ahí para apoyar o perseguir a alguna de las partes en el conflicto", señaló anoche la Secretaría de Gobernación (SG).
En tanto, fuentes de la dependencia aseguraron que el próximo lunes se evaluará la retirada de los policías, "porque si continuamos más allá de la próxima semana, entonces sí estaríamos apoyando la gestión" del gobernador Ulises Ruiz.
Tras una reunión privada de más de tres horas entre el titular de la SG, Carlos Abascal Carranza, y sus colaboradores más cercanos, así como el director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, Jaime Domingo López Buitrón, se analizó el operativo de la PFP, las dificultades para el retorno a clases en más de 13 mil planteles y el avance de las auditorías a la administración local, pero sobre todo la necesidad de la salida de Ulises Ruiz.
"No tengo información que me permita reforzar la idea (que el gobernador pudiera pedir licencia en los próximos días), aun cuando es un clamor popular y del Poder Legislativo que (Ruiz) se tiene que ir", expresó una fuente de alto nivel de la SG, al término de la reunión de trabajo en Bucareli.
Agregó que la petición de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) para que se establezca una negociación directa y personal con el presidente Vicente Fox no es una postura oficial de la asociación, sino de un dirigente en particular.
Aseveró que continúa la comunicación (vía telefónica) con otros líderes del movimiento para fijar una fecha del eventual restablecimiento de la mesa de negociación en la SG, no sólo por la encomienda de Fox a Abascal, sino porque el proceso para la solución del conflicto es atribución del responsable de la política interior, según dispone la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Las fuentes consultadas confiaron en que el acercamiento con la APPO ocurra después del domingo, luego de la megamarcha que organiza este conglomerado de organizaciones sociales.
Por la noche, el subsecretario de Gobierno de la SG, Arturo Chávez, leyó un comunicado en el que afirma que el objetivo de la presencia de las fuerzas federales es el restablecimiento del orden y la seguridad de la ciudadanía, "ante la incapacidad de los gobiernos estatal y municipal de garantizar la paz social" y en el acatamiento a lo dispuesto por la Carta Magna.
Sostuvo que, "gracias a la intervención de las fuerzas federales, hasta el momento se ha logrado recuperar el orden y la vida cotidiana en el centro histórico de la ciudad y en los principales accesos carreteros de la entidad".
En ese contexto, enumeró que la PFP ha restablecido la circulación en la carretera federal 190, principal acceso a la capital del estado, que comunica con la autopista Oaxaca-México. Se reabrió el tránsito en el punto conocido como Brenamiel.
Destacó que las instalaciones de las radiodifusoras privadas han sido entregadas a sus propietarios, así como el Canal 9 de la televisión local. Añadió que existe una "normalización importante" en la actividad hotelera, restaurantera y comercial de la ciudad.
No obstante, el gobierno federal admitió que la gobernabilidad y la estabilidad no se alcanzarán sólo con el apoyo de la fuerza pública o las gestiones que realice la Federación.
"Cualquier resultado positivo tendrá que ser integral y a fondo. Sólo el diálogo de los oaxaqueños con y para los oaxaqueños, la reconciliación entre ellos y el planteamiento de objetivos comunes en beneficio de todos sacarán a Oaxaca de este muy lamentable conflicto", señala la SG.
El subsecretario Chávez, a nombre de la dependencia, calificó de positivo el impulso del diálogo por conducto de personas e instituciones independientes, así como la normalización de las clases "en amplios sectores del estado", situación que se espera ocurra de manera generalizada el próximo lunes.
En el último punto, la SG señaló que en Oaxaca "hay identidad de objetivos" y, en este sentido, ratificó su disposición para fungir como intermediaria para cualquier encuentro entre las diferentes organizaciones sociales y los poderes de la entidad.