Escasa relevancia de la última sesión del encuentro; ausentes, ocho mandatarios
Fox elogia su sexenio durante clausura de la 16 Cumbre Iberoamericana
Ampliar la imagen Carlos Lage, vicepresidente cubano; Celso Amorim, canciller brasileño, y Michelle Bachelet, mandataria chilena, posan para la foto oficial de la cumbre. A la derecha, los presidentes Antonio Saca, de El Salvador, y Vicente Fox, de México, en la última jornada del encuentro Foto: Ap y Reuters
Montevideo, 5 de noviembre. Sin que los mandatarios asistentes a la 16 Cumbre Iberoamericana hicieran referencia alguna al final del mandato de Vicente Fox, éste alzó la voz y se despidió con algunos elogios a su administración: la integración de las comunidades indígenas al desarrollo, la fórmula de inversión pública-privada para alentar el desarrollo y la aplicación de la tecnología a las aulas en las escuelas primarias mediante Enciclomedia.
Al concluir una desangelada reunión se conjuntó una serie de sucesos que le restaron relevancia, como las ausencias de ocho presidentes, entre los que destacan Luiz Inacio Lula da Silva, de Brasil, y Hugo Chávez, de Venezuela; el diferendo fronterizo entre Argentina y Uruguay, que propició que los mandatarios de ambos países, Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez, no se dirigieran la palabra en ningún momento; o la evidente pérdida de liderazgo regional de México durante la administración foxista.
En medio de todo eso, al clausurarse los trabajos del encuentro, el presidente de la mesa, el uruguayo Tabaré Vázquez, evidenció el hartazgo cuando al preguntar a los presentes si alguien deseaba intervenir, observó que Vicente Fox lo solicitó y replicó con desgano: "Ah... México".
El mexicano habló por última vez en el cónclave. Aludió a sí mismo como el decano de la reunión, "salvo su majestad (Juan Carlos Primero de España), que seguramente lleva 15 o 16 viniendo". También dijo que al sentirse como en casa, no basta con el sentimiento de hermandad hemisférica, "tenemos que convertir estas reuniones en resultados eficaces".
Tal como lo hizo durante toda su administración al frente del gobierno de México, afirmó que las naciones deben fortalecerse mediante el aprovechamiento de sinergias. Entonces se refirió a las "experiencias exitosas" de Brasil en el terreno de la energía alterna y el desarrollo rural.
Otra referencia fue a Chile. "Hay una fuente de inspiración; la hay en Chile cuando se habla de pobreza, cuando se habla de equidad, cuando va uno y conoce en detalle todo lo que está detrás del éxito en esa materia".
Una tercera referencia fue a Bolivia, porque su "gobierno, su pasión ahora por nuestras hermanas y hermanos indígenas, por rescatar esas formidables culturales (sic), por rescatar esa energía ancestral que hoy en día es importante para el desarrollo de nuestros países en la diversidad".
Además, antes de retirarse a un almuerzo de despedida con Vázquez y posteriormente retornar a la ciudad de México, Fox habló del Seguro Popular, al que describió como una póliza de seguro médico, y de fórmulas de inversión, públicas y privadas, que ayuden a potenciar, ampliar y extender la capacidad presupuestal del gobierno, que en el caso mexicano significaron inversiones "que nunca antes habíamos podido pensar que tendríamos" en vivienda, energía, infraestructura, puertos, aeropuertos.
Fox aprovechó la oportunidad "para agradecer a ustedes su apoyo a la candidatura de México para encabezar el esfuerzo de la Organización Mundial de la Salud que, ciertamente, nos ha fortalecido en esa lucha y esperamos llegar hasta el final y tener ahí a un iberoamericano".
En el límite de la conclusión del encuentro, el mandatario mexicano también puso sobre la mesa su programa Enciclomedia, por el cual 200 mil escuelas de educación básica están conectadas a la red de Internet, mediante pizarrones electrónicos.
Con un rasgo de pesadumbre, el representante mexicano dijo a sus homólogos que resultaba un honor haber compartido el trabajo multilateral.
"No puedo ver más que una Iberoamérica fuerte, exitosa, porque nos hemos hecho el propósito de hacerlo así... Estos seis años para mí, en estas reuniones, han sido fuente de energía y de motivación y, por tanto, agradecerles que me hayan dado esta oportunidad de convivir, de aprender, de escuchar, de proponer, de debatir. Todo eso es lo que realmente nos enriquece".