Resultado del censo realizado por autoridades en las zonas aledañas a los hechos
Tuvieron daños por los bombazos del lunes, 105 casas y 12 comercios
Notorio incremento de vigilancia policiaca en sucursales de la cadena Wal Mart
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Secuelas en un edificio habitacional del estallido de un artefacto, la madrugada del lunes, frente a las instalaciones del Tribunal Federal Electoral ubicadas en la calle de Carlota Arnero, en el sur de la ciudad
Foto: Carlos Ramos Mamahua
La presencia de policías auxiliares y elementos de seguridad privada con perros en estacionamientos y a las afueras de centros comerciales se incrementó desde el pasado martes, luego de las detonaciones de artefactos explosivos ocurridas el lunes en la madrugada.
La orden es reportar de inmediato cualquier anomalía al puesto central de control de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del DF, a fin de evitar riesgos para el público y los empleados, explicó personal de vigilancia, y aseveró que el mayor número de efectivos se concentra en las tiendas Wal Mart y sus alrededores.
En tanto, el Gobierno del Distrito Federal (GDF) comenzará a pagar hoy los daños sobre todo la reposición de cristales rotos por las explosiones en una sucursal bancaria de la delegación Tlalpan y en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), en Coyoacán.
Conjuntamente con las autoridades de ambas demarcaciones, el Gobierno del DF acordó con los vecinos que sean ellos quienes estén a cargo de las reparaciones en sus puertas y ventanas, y con la factura correspondiente, la Procuraduría Social rembolsará el dinero gastado.
En tiendas de la cadena Wal Mart, personal de seguridad privada que reforzó la vigilancia refirió que a raíz del proceso electoral del 2 de julio, esos establecimientos se han convertido en "punto de ataque" de manifestantes. Recordó que hace unas semanas un grupo ingresó a la sucursal de avenida Universidad, donde protestó tirando y destruyendo mercancía, y además realizó pintas en el interior.
Los rotwailer espantan al público
La determinación por ello de reforzar la vigilancia en sus accesos. La presencia de un mayor número de efectivos no pasa inadvertida para los clientes, quienes se desconciertan ante el despliegue de elementos de seguridad privada con perros, que recorren el estacionamiento, las entradas de las tiendas y el área de paquetería.
Los vigilantes emplean perros entrenados, sobre todo de la raza rotwailer, cuya sola presencia "espanta" a la gente, aunque los mantienen con bozal. Además, los guardias mantienen contacto permanente con los diversos cuerpos de Seguridad Pública, que incrementaron sus rondines en la ciudad, ante la amenaza de nuevas explosiones. La tarea, explicaron los uniformados, se complica por las denuncias anónimas de personas que no miden el alcance de sus bromas.
Mencionaron que horas después de las explosiones del lunes, se recibieron varias denuncias de paquetes dejados en botes de basura, jardineras o en automóviles, las cuales fueron verificadas antes de emitir una llamada de alerta, para no generar sicosis.
Por ello, en los centros comerciales se incrementó la presencia policiaca y se mantiene un monitoreo constante de las cámaras de video instaladas en esas instalaciones.
"Hacía buen tiempo que no se presentaba una situación de esta índole, pero estamos preparados para atender cualquier emergencia", señalaron policías que solicitaron el anonimato.
En cuanto al pago de daños por las explosiones, se levantó un censo con participación de diversas áreas de las dos demarcaciones, así como de las secretarías de Salud y Seguridad Pública capitalina, bajo la coordinación de la Secretaría de Gobierno.
Según el censo, sufrieron daños 105 viviendas y 12 establecimientos comerciales.
La Secretaría de Gobierno explicó que el acuerdo con las autoridades delegacionales es que la administración central pagará los cristales, y para los trabajos de herrería en puertas y reparaciones de fachadas las demarcaciones pondrán la mano de obra.
Para entregar el dinero, una vez que la Secretaría de Finanzas liberó los recursos, la Prosoc y las delegaciones instalarán módulos a los que deberán acudir los afectados y presentar la factura, identificación y comprobante de domicilio.