Disertación sobre genocidio del sociólogo James Petras en la UNAM
El desarrollo del capitalismo coincide con prácticas de exterminio en el mundo
Los asesinatos en masa se utilizan como herramienta para construir imperios, afirma
Ampliar la imagen James Petras, de la Universidad de Nueva York, durante su participación en el ciclo sobre Modernidad. Los genocidios, organizado por la UNAM Foto: Carlos Ramos Mamahua
La expansión del capitalismo ha coincidido con las experiencias genocidas en el mundo; es decir, asesinatos en masa a gran escala utilizados como herramienta para la construcción de imperios, afirmó ayer James Petras, sociólogo, analista y colaborador de La Jornada, y sostuvo que el holocausto judío no ha sido el único, como pretenden ciertos analistas o medios de comunicación, e hizo referencia a las guerras en Africa del Sur, Indochina, Corea y Centroamérica.
Dentro del ciclo Modernidad. Los genocidios, realizado en la sede del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (CIICH-UNAM), ubicada en el cuarto piso de la Torre II de Humanidades, James Petras analizó el impacto, las consecuencias y los resultados humanos que ha tenido la construcción imperial en el siglo XX, particularmente en términos de costo de vidas en los genocidios perpetrados en esa etapa.
Para el sociólogo el tema resulta fundamental para entender los procesos de integración y subordinación experimentados tanto en América Latina como en el resto del mundo. James Petras colaboró con el gobierno de Salvador Allende. Después del golpe de Estado perpetrado por Augusto Pinochet fue miembro de Tribunal Russell, junto con Gabriel García Márquez y Julio Cortázar, erigido para enjuiciar la represión en América Latina.
Actualmente profesor de Etica Política en la Universidad del Estado de Nueva York, en Binghampton, Petras señaló que no es posible considerar el holocausto judío bajo el régimen de Adolfo Hitler como un caso único, ya que, añadió, el genocidio se ha visto en los procesos de construcción de los imperios.
"Los asesinatos a gran escala no son únicos, y se repiten", añadió, para luego señalar que este tema, a la luz del holocausto judío, resulta "controversial", e hizo referencia a otros casos. Petras definió la palabra holocausto como el exterminio a gran escala de civiles no combatientes, extendido en el tiempo y sobre grupos étnicos, de clase y religiosos. Apuntó al caso palestino bajo el yugo israelí como "un proceso de genocidio que vivimos actualmente".
"Decir que el costo de holocausto provocado por los nazis es único no tiene sentido, porque existen otros de escala similar que se deben tomar en consideración". Añadió que el concepto de culpa colectiva de los alemanes "es falso", porque los nazis persiguieron, primero, a los comunistas, a los anarquistas y a los sindicalistas, "a 30 millones de rusos, a los homosexuales, a los gitanos y, claro, a los judíos".
"Desde antes de la subida de Hitler ya existía una fuerza dominante de carácter antisemita en la política alemana", subrayó. "Y cierto es que el apoyo de los sectores sociales alemanes al nazismo, antes de que tomara el poder, cayó de 37 a 33 por ciento. El nazismo estaba a la baja. Y sólo consiguió el poder y empezó con los cambios cuando los partidos burgueses, apoyados por el gran capital, lo hicieron triunfar. Históricamente, no se puede decir que antes de Hitler ya existía la represión a judíos o sindicalistas".
Con ello, continuó, se logró derrumbar una tendencia histórica de Alemania desde el siglo XIX".