Al parecer sirven a ciertos intereses, afirma el gremio
Otorga el IMSS jefaturas a disidentes del sindicato
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) "premió" a los líderes de la disidencia de su gremio con "jefaturas de departamentos" y les otorgó puestos de confianza de los mejor pagados, para que no tuvieran que regresar a sus plazas de sindicalizados.
Los doctores Miguel Angel Vandick Puga y María Esther Pérez Barragán, quienes lideraron planillas opositoras en el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS) en el pasado proceso electoral y trataron de impedir la realización del 65 congreso nacional ordinario de esta organización, fueron colocados esta semana en sendas "jefaturas" del área médica por parte de la dirección del instituto.
En tanto, Joaquín Castillo, quien estuvo al frente de otra planilla y junto con otros disidentes encabezó la llamada Coalición Democrática del sindicato, pidió ser jubilado y en cuestión de días le autorizaron su trámite, que a la mayoría de los trabajadores les toma varios meses.
De esta forma, las principales cabezas del movimiento de oposición que se dio al interior del SNTSS y que hizo su mayor crisis en el congreso en Morelia, abandonaron en cuestión de días el sindicato para aceptar puestos de confianza, según informó el propio gremio.
Esta organización aseguró que los opositores "se arropan dentro de la estructura del IMSS para no regresar a sus puestos de trabajo como sindicalizados, toda vez que luego del proceso electoral se les había acabado su licencia y tenían que regresar a laborar a las clínicas en las que estaban asignados. Sin embargo, ahora no lo tendrán que hacer, e incluso el IMSS los premia con puestos de cierta jerarquía".
Al respecto el secretario general del SNTSS, Valdemar Gutiérrez Fragoso, planteó ayer que al parecer la disidencia se acabó muy pronto, porque apenas ha transcurrido un mes de que concluyó el proceso electoral y Vandick, Pérez Barragán y Castillo negociaron plazas, jefaturas o beneficios especiales con el instituto.
Dijo además que es incongruente que quienes hablaron de defender al sindicato lo abandonen tan fácilmente, con tal de no regresar a trabajar a donde estaban asignados. Valdemar había señalado anteriormente que el gremio iba a dar seguimiento a las violaciones en que habían incurrido diversos trabajadores y que se aplicarían las sanciones correspondientes.
Para ellos fue muy fácil lanzar una campaña de desprestigio contra el sindicato, presentar impugnaciones contra su proceso, presentarse como redentores y luego aprovechar esto en su favor, nunca hicieron una campaña propositiva, tal parece que sirvieron a intereses alejados de la organización, aseguró.