Resistencia a flemas pone a británicos en riesgo cardiaco
Londres, 21 de noviembre. La célebre flema de los británicos tendría consecuencias más bien inesperadas para la salud, porque una persona sobre cuatro, antes de prevenir espera a tener dolor en el pecho, a menudo signo de una crisis cardiaca, según un estudio publicado recientemente.
La Fundación Británica para el Corazón (BHF, por sus siglas en inglés) advierte en el informe que, en caso de crisis cardiaca, cada segundo cuenta y la "reserva" de los británicos hace que demasiada gente decida "esperar y ver".
El estudio se publicó con motivo del lanzamiento de la BHF de una campaña de sensibilización con el lema La duda mata, para incitar a la población a reaccionar desde los primeros síntomas de dolor. La mayoría de las personas cree que una crisis cardiaca es extremadamente dolorosa y considera que cuando hay un dolor menor se trata de una indigestión, explicó la fundación.
Unas dos terceras partes de las personas interrogadas (64 por ciento) telefonearía a un amigo, un miembro de su familia o un médico antes de dirigirse a los servicios de urgencia si sintiera dolor en el pecho.
Ochenta por ciento de los encuestados responde que pondría en duda la gravedad de la situación, mientras que 42 por ciento prefería esperar para ver si el dolor se calma.