En peligro, la riqueza biológica del golfo de California
Desprotegido, el Acuario del Mundo: Greenpeace
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Imagen de archivo del avistamiento de ballena gris en la laguna San Ignacio
Foto: José Antonio López
Frenta a una actividad económica marítima no sustentable, el golfo de California no cuenta con la protección necesaria para garantizar la permanencia de su extraordinaria riqueza biológica, que está compuesta por miles de especies marinas y terrestres, de las cuales unas mil son endémicas, advirtió la organización ambientalista internacional Greenpeace.
Al golfo de California se le llama también el Acuario del Mundo, porque está habitado por alrededor de 890 variedades de peces (77 endémicos); 33 especies de cetáceos (casi la mitad del total del planeta); es hogar de la vaquita marina, único mamífero marino endémico de México y que se encuentra en peligro de extinción; es refugio de la ballena azul, el animal más grande del planeta, así como de la ballena jorobada que migra desde Alaska para reproducirse en estas aguas.
"Resulta irónico que toda esta riqueza natural y los extraordinarios paisajes de la región estén atrayendo mayores amenazas sobre el Acuario del Mundo. La visión de corto plazo y la búsqueda de ganancias inmediatas están degradando este ecosistema fundamental. De ahí la necesidad urgente de adoptar medidas que garanticen la subsistencia de la riqueza natural del golfo de California para que las actividades productivas beneficien tanto a las presentes como a las futuras generaciones", afirmó Alejandro Olivera, coordinador de la campaña de océanos de Greenpeace.
La zona es uno de los cinco ecosistemas marinos con mayor productividad y biodiversidad del planeta, pero su riqueza no es inagotable. Así lo demuestra la sobrexplotación de algunas especies. Por ejemplo, las célebres "perlas de California" fueron extraídas hasta que se agotaron los bancos de ostras, en 1939. La sobrepesca ha afectado de manera drástica la población del tiburón, la sardina y el camarón, mientras que la totoaba, especie endémica, se encuentra casi extinta.
A estos problemas se suman otras actividades como sobrexplotación de los mantos acuíferos, la contaminación, la agricultura no sustentable, la acuacultura y la destrucción de hábitats por parte de desarrollos turísticos incontrolados.