Busca que su obra se integre con el entorno
Inaugura Helen Escobedo su instalación Transparencias
Con la idea de la integración del arte y el entorno natural, ayer fue inaugurada por la artista plástica Helen Escobedo la instalación Transparencias, cuyo punto de partida es buscar la creación de esculturas u objetos que dejen "pasar la mirada" a través de ellos para que no interfieran o se consideren una "intrusión" en el espacio que ocupan.
La Casa Verde, galería abierta, con jardín y rodeada del bosque del Desierto de los Leones, es el escenario de esta obra de 30 columnas de malla de alambre galvanizado y ondulada en formas cilíndricas, de 2.40 metros de altura y 50 centímetros de diámetro.
Cada columna consta de tres cilindros contenidos uno en otro y pintados, el más chico, de amarillo; el de en medio, de naranja, y el exterior, de rojo. Comparte Helen Escobedo con La Jornada:
"La transparencia es poder ver lo que está detrás, o evidenciar lo que estaba antes. Poner en relieve, en particular, los rayos del sol que atraviesan estas piezas, el verdor de los pastos, la sombra de los árboles, hasta la hojarasca cuando se viene el otoño. Es poder atravesar con los ojos luminosidades aparentes o, al atardecer, oscuridades luminosas. Finalmente, es no interferir con lo que ahí ya está."
"Como poesía inacabada"
Escobedo comenta cómo concibió esta obra. "Llevo ya mucho tiempo trabajando con Transparencias. Todo comenzó en 1968, cuando estaba haciendo la gran escultura en la ruta olímpica, la número 17, Puertas al viento. Llegué una mañana, cuando ya estaban completando la estructura de hierro, de varilla, y se me hizo fantástico ver esa armazón transparente.
"Se veía lo que estaba atrás: la yerba, los árboles, el cielo, y se veía la escultura como en proyecto, como en promesa, como una poesía inacabada. Y pensé entonces: si ahorita me encanta, cómo se verá cuando esté terminada, cubierta de concreto y pintada en azul y verde.
"Pues la vi terminada, y desde ese momento supe que nunca más cubriría una estructura. Y a partir de entonces mi material favorito para obras permanentes o semipermanentes, es la malla de acero en todos sus calibres, porque se deja pintar y se deja ver a través. Cuando se va el sol, el cilindro más visible, de los tres que tiene cada columna, es el más chico: el amarillo, que refleja más la luz.
"Es muy extraño cómo cambian los aspectos de esta instalación, según estén colocadas las columnas y en qué sitio, porque se transparenta lo que está detrás. También he tomado fotos al oscurecer, cuando ya no se ve ni la mitad de las 30 torres."
La artista señala que con esta idea se busca romper con un aspecto intrusivo que de alguna manera tiene toda escultura al ser colocada en un espacio natural o urbano.
"Es no interferir con lo que ya está, sino ponerlo en evidencia: la maravilla del jardín, de la luz sobre estos objetos, que al mismo tiempo están dejando ver lo que está, justamente, atrás. Entonces, es una especie de poema mío, respetar el sitio".
Previa cita al teléfono 5810-1445 para visitas guiadas, Transparencias se podrá observar "unos meses" en La Casa Verde (www.lacasaverde.com.mx), ubicada al final de una vereda de 600 metros que parte del Kilómetro 28.5 del Camino al Desierto de los Leones, colonia Santa Rosa Xochiac, México, DF.