El roquerflamenquero se presenta hoy en el Lunario
La fama es un fardo que sólo estorba: Kiko Veneno
Presenta en México su nuevo disco, El hombre invisible
Ampliar la imagen "México es un país que tiene el inconsciente a flor de piel", aseguró el músico andaluz durante la entrevista con este diario Foto: Chava Rock
Kiko Veneno está en México. Pero la noticia es que el personaje que fusionó el flamenco con el rock por fin ofrecerá una serie de conciertos en el país. Este domingo estará en el Lunario del Auditorio Nacional, el 29 se presentará en Guadalajara y el primero de diciembre en León.
Kiko, José María López Sanfeliu, es el legendario músico andaluz, el sobreviviente del franquismo, el de corazón gitano, el del veneno que da vida. Kiko, el que ha trabajado con Camarón, con Ana Belén, con Albert Plá, con Santiago Auserón (Juan Perro), el mismo que participa en el disco homenaje a Joan Manuel Serrat y colabora con Martirio.
El joven roquerflamenquero (nació en 1952) actuará por primera vez en México, al que describe como "un país en el que la tierra respira a través del inconciente de las personas y está muy vivo".
Kiko le dio un giro a su vida en 1975, cuando conoció a los hermanos Rafael y Raimundo Amador, con quienes formó el grupo Veneno; dos años más tarde saldría su primer disco, poco valorado entonces y ahora considerado uno de los más importantes en la historia musical de España.
En 1982 inició su carrera como solista, quedándose con la sustancia en el apellido. Lleva décadas marginado de la industria discográfica, pero es reconocido en toda España y el público lo valora más a raíz de la presentación de su más reciente álbum, El hombre invisible, trabajo delicioso que denota capacidad creativa. Ese disco se ha editado apenas en el país y es el motivo de su presencia aquí.
¿Por qué en tantos años de carrera no había venido?
Ni a México ni a ningún lado. Mis discos no se distribuyeron en ningún país, solamente en España; ni en Portugal, Francia o Italia. Siempre fui una persona singular: la industria española me miró siempre con reserva. Nunca fui esa persona que las compañías de discos, al menos en España, pueden mirar como promocionable. Siempre me gusta tener mi lengua suelta, hablar de lo que creo que debo hablar, tener mi propia fe. Por eso estoy doblemente agradecido que EMI México piense que puedo tener un lugar aquí.
También viene a tocar.
No sé sí ustedes lo sepan, pero desde España se ve a América como algo muy grande, en lo que nosotros tuvimos parte en las culpas de lo malo y lo bueno, aunque también nos devuelve un aliento. Cuando escuchamos el idioma español con el acento mexicano, el argentino o el peruano, nos parece que ustedes llegan mucho más lejos que nosotros; el idioma castellano lo tienen embellecido, lo tienen musicalizado con su acento, utilizan expresiones que nosotros, con el lenguaje de la prisa, de la velocidad, ya perdimos. Así que es algo como una reserva de vida que tenemos allí, al otro lado del Atlántico. Ahora se dieron las circunstancias de venir a cantar y aquí estoy, y quizá repita el año que viene.
"Otra cosa que nos gusta mucho, como dice Alejandro Jodorowsky, es que México es el país que tiene el inconsciente más a flor de piel. Este es un país en el que la tierra respira a través del inconsciente de las personas y está muy vivo. Estamos muy deseosos de recibir cosas de ustedes. Cuando Chavela Vargas canta y cierra los ojos el mundo tiembla en Sevilla y adonde vaya. Lo mismo ocurre cuando leemos lo que escribe Carlos Castaneda sobre los chamanes; cuando Chavela habla de esos chamanes, cuando Octavio Paz hace el prólogo a los libros de Castaneda.
Se ha mantenido al margen de la industria discográfica, ¿por qué?
Creo que hay que mantenerse al margen de la publicidad, de la propaganda. La moda conlleva mucho alboroto, pero es muy superficial: hipoteca el futuro, te convierte en un artista de usar y tirar. Si no tienes tanta prisa ni tanta necesidad de reconocimiento ni tantas ganas de ser famoso puedes trabajar con mayor tranquilidad. Al final el cariño que te van a dar será más auténtico. Ese fue el cariño que yo escogí.
Orígenes del veneno
Ha trabajado con mucha gente.
Sí, empecé con Raimundo Amador, que es uno de los grandes de la música española. De allí tuve mucho contacto y conocimiento con la música de los gitanos y los flamencos de Andalucía. Así llegué con Camarón, el artista flamenco más grande de nuestra generación, y luego con Radio Futura, el grupo que consolidó el rock cantado en español.
A la par de Radio Futura nace Veneno
Sí, Radio Futura graba su disco en 1976 y nosotros, Veneno, en 1977.
¿De qué hablaba entonces?
Era un tema muy andaluz, muy surrealista. Ahora Los Delinqüentes grupo con el que alternará su actuación en el Lunario han recuperado ese lenguaje callejero, vital y alegre, con una orientación y raíces de la tradición flamenca, que es muy loca, pero al mismo tiempo muy cuerda.
¿Ya no está dentro del flamenco?
Eso fue cuando trabajé con Camarón. Ahora estoy con grupos, cantantes y músicos que hacen su propio repertorio, como Los Delinqüentes, Martirio, Jorge Drexler, Albert Plá y La Sesión, un grupo de hip-hop gitano. Esa es la gente con la que me muevo, con la que vibro, en la que encuentro cariño. No soy gitano, pero ellos tienen algo que enamora.
Trae un disco, El hombre invisible
Lo grabé el año pasado en España. Es un disco que tiene una colección de rock, pop, música brasileña. Es guitarrero, rítmico, con influencia del rock, del flamenco y el pop, pero estoy preparando nuevo material: ya tengo una canción que voy a preparar para cantarla en México, se llama Cadena de oro. Estoy haciendo canciones con Tomasito.
El flamenco mantiene encendida siempre su antorcha...
Hay una moda de flamenco clásico que se ha convertido en música de repertorio obligado en todos los teatros de culto del mundo. El flamenco en su forma clásica de cantes dramáticos, el sonido legendario de la guitarra, los bailes, la coreografía... eso rompió definitivamente las fronteras y es una música que gira por todo el mundo. Eso quedó un poco estancado ahí, digamos que lo que sale o se renueva un poco es el flamenquito o la música más aflamencada, pero sin dudar de la raíz y la fuerza está en esa forma clásica y es allí de donde saldrán los giros que vayan a recrear, fortalecer y dar nuevos frutos para el futuro, todo va a salir de las formas clásicas del flamenco.
Este domingo Kiko Veneno estará en el Lunario con Los Delinqüentes, grupo jerezano que presentará su tercer disco, El verde rebelde vuelve.
Lunario del Auditorio Nacional, Paseo de la Reforma y Campo Marte s/n, colonia Chapultepec Polanco, a un costado del Auditorio Nacional, Metro Auditorio (5325-9000), 20 horas.