Entrevista a PATRICIA ESPINOSA CANTELLANO, SECRETARIA DE RELACIONES EXTERIORES

Migración y EU seguirán siendo temas prioritarios

SE FORTALECERA AL MAXIMO EL DIALOGO CON CUBA

La nueva responsable de la política exterior de México define lo que serán sus encomiendas: la defensa de los intereses y derechos humanos de los connacionales en Estados Unidos y reposicionar a nuestro país en el contexto global

JOSE ANTONIO ROMAN

Dentro de la "enorme diversidad y complejidad" que representa la agenda bilateral con Estados Unidos, el tema migratorio seguirá siendo prioritario. "La vida de millones de mexicanos se ve afectada diariamente por lo que sucede en esa relación", aseguró la nueva secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa Cantellano.

El compromiso de defender los intereses y los derechos humanos de los mexicanos en el vecino país del norte, reconoce, estará acompañado de los recursos económicos con los que se cuente, pues el tema presupuestal siempre impone una limitación muy clara a las posibilidades de llevar adelante cualquier proyecto. Sin duda nuestra intención es poder obtener mayores recursos, en medio de un presupuesto que se anuncia ya austero.

En entrevista con La Jornada, la nueva responsable de la política exterior de México señala la encomienda de empezar a construir una política exterior de Estado, que vaya más allá de una administración, en la cual se reposicione a México en el contexto global y sea capaz de apuntalar el desarrollo económico y social del país. Reconoce abiertamente que el país "atraviesa un momento político muy especial y una situación sin precedente", pero dice encontrar "bases extraordinarias" para poder trabajar y cumplir las metas trazadas en política exterior.

Diálogo y más diálogo es lo que impulsará en la relación con Estados Unidos, que sencillamente seguirá siendo la nación prioritaria; con Europa, el nivel político de las relaciones va muy bien, pero el económico es el tema todavía pendiente; Asia, es el "gran reto" futuro del país, y con América Latina "estamos decididos" a trabajar una relación estable, respetuosa y constructiva.

De manera especial, la canciller Espinosa confía en que la creación del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en la que ya no se vota para pedir la intervención de observadores, contribuirá a mejorar las relaciones diplomáticas con Cuba, dañadas desde hace dos sexenios; mientras que para el caso de Venezuela, señala que se trabajará por restaurar los canales de comunicación, y "pienso que con perseverancia y mucho trabajo lo vamos a lograr".

Durante la entrevista, realizada en el centro de negocios del Hotel Sheraton Centro Histórico, localizado a unas cuadras del edificio de la cancillería, donde despachará a partir de hoy, Espinosa Cantellano advierte, antes de responder a un par de preguntas, que literalmente tiene apenas cuatro días de aterrizar en la ciudad de México y que se está poniendo al tanto de muchos de los temas en los que deberá decidir.

De la pregunta obligada sobre el futuro de quien fuera el coordinador del área internacional del equipo de transición de Felipe Calderón y que se suponía sería el canciller, dijo que en su momento será anunciada la responsabilidad que le asignarán, pero aprovechó la oportunidad para decirse contenta de contar con el apoyo y colaboración de un "diplomático tan destacado".

Cuba y derechos humanos

­¿Cómo abordar el tema de Cuba, luego de dos sexenios de frialdad en la relación y de francos desencuentros?

­Cuba es un país al que nos une una muy profunda relación histórica, donde siempre nos hemos sentido muy cercanos. He tenido el privilegio de trabajar en muchos temas con las delegaciones cubanas, sobre todo en los foros multilaterales. Lo que ahí pienso hacer es fortalecer el diálogo al máximo, y lograr que se entienda muy bien que el gobierno de México quiere establecer una relación constructiva, respetuosa y de largo alcance. Le doy un ejemplo: en materia de derechos humanos hay una preocupación constante en la política exterior mexicana. México ha sido uno de los principales constructores del régimen internacional en materia de estas garantías, y ahora, en el Consejo (de Derechos Humanos de la ONU, que sustituyó a la comisión) estamos asumiendo la presidencia de ese órgano.

­¿Cree que con el trabajo de este nuevo órgano de la ONU serán restañadas las heridas con el gobierno cubano?

­Eso es lo que nosotros estamos empujando, eso es lo que nosotros estamos trabajando porque, es más, le quiero decir, problemas de derechos humanos hay en todo el mundo, entonces, la intención es que logremos avanzar hacia un sistema multilateral en donde todos los países de la comunidad internacional estemos sujetos a ese consejo, no sólo unos cuantos.

­¿Cómo le van a hacer en el caso de Venezuela?

­Creo que con base en todas esas relaciones de amistad que hay en nuestras sociedades y pueblos, tenemos una oportunidad muy importante que me propongo aprovechar; tenemos la llegada de un nuevo gobierno, la voluntad expresada y reiterada de construir esta relación. Vamos a darle toda la atención para restaurar el diálogo, restaurar los canales de comunicación, y pienso que con perseverancia y mucho trabajo lo vamos a lograr.

­¿Lo cree así aun cuando quien encabezará este nuevo gobierno utilizó la figura del presidente Chávez para denostar a su adversario? ¿Será un doble trabajo?

­También es muy claro que estamos hablando de construir una política exterior de Estado, por esa razón, también la designación de alguien del Servicio Exterior Mexicano, alguien que tiene una visión que va más allá de una administración, que es una visión que tiene un escenario temporal de más largo plazo.

''Soy amiga de Carstens''

­En la relación con Estados Unidos, ¿el tema prioritario seguirá siendo la migración?

­Con Estados Unidos, sin duda es una relación prioritaria, la vida de millones de mexicanos se ve afectada diariamente por lo que sucede en nuestra relación con esa nación. Ahí vamos a insistir en el diálogo. Y en cuanto a los temas, es necesario reconocer la enorme complejidad y diversidad de la agenda bilateral; sin duda, el tema migratorio va a ser prioritario, la defensa de la situación de los mexicanos en el exterior, pero no sólo eso, sino darle una atención a otros aspectos también.

­Este nuevo gobierno ha asumido el compromiso de defender los intereses de los mexicanos en el exterior, ¿habrá mayor presupuesto? Porque con insistencia se hablaba de las necesidades y de los pocos recursos.

­El tema presupuestal siempre impone una limitación muy clara a las posibilidades de llevar adelante cualquier proyecto; sin duda nuestra intención y objetivo es poder obtener más recursos. Ahora, al mismo tiempo tenemos una conciencia clara de que ya ha quedado definido que vamos a tener un presupuesto austero para 2007, pero aquí le cuento que yo tengo la suerte de conocer muy bien al secretario de Hacienda designado, Agustín Carstens, pues fuimos compañeros desde la primaria ­en el Colegio Alemán­, así es que ya tuve la oportunidad de saludarlo y de adelantarle que voy a ir a tocar a su puerta para que platiquemos y que me dé la oportunidad de plantearle las preocupaciones y necesidades de la cancillería.

­Hoy hay un reclamo de productores agrícolas de revisar el TLCAN, que prevé la liberalización del maíz en 2008, ¿hay posibilidades de que se pueda revisar el acuerdo comercial?

­Le quiero confesar que no tengo el detalle de esos temas, pero es un asunto tan delicado que requiere un análisis detallado y muy preciso de cuáles son los aspectos de los que se estaría hablando. De manera general le digo que en los ejercicios de negociación internacional, con frecuencia se habla de la necesidad de actualizarlos, de modificar algunos de estos tratados, pero también con frecuencia se llega a la conclusión de que es mejor no abrirlos, porque probablemente no se llega al mismo acuerdo.

­La llamada Doctrina Estrada, ¿todavía es vigente en el nuevo proceso de globalización, donde se pierden fronteras y se confunden soberanías?

­Yo creo que más que hablar de doctrinas, de lo que yo hablaría... tenemos una política exterior que está basada en los principios que están consagrados en la Constitución, y que está guiada por los intereses de México. Yo creo que ese es el marco en el que debemos movernos; tenemos una muy buena base jurídica, tenemos una serie de convicciones también y, al mismo tiempo, tenemos muy claro cuáles son los intereses: promover el desarrollo económico y social, defender a los mexicanos en el exterior, promover los vínculos financieros, comerciales, culturales; yo creo que ahí existe una agenda muy clara y tenemos también principios muy claros.

Al final de la entrevista, para la grabación de un programa especial, también llegó al centro de negocios del hotel el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Juan Ramón de la Fuente, quien acompañado de Carlos Fuentes saludó a la nueva canciller, presentándole al escritor.