Cambio de gobierno
Exhorta a la Iglesia católica a que se abstenga de "casarse con el actual gobierno"
Vive el país la crisis política más grave desde la Revolución, opina Raúl Vera
La polémica toma de posesión del presidente Felipe Calderón y los acontecimientos en torno a su asunción son un fuerte indicativo de que el país vive la crisis política más grave de su historia desde la Revolución de 1910, afirmó el obispo de la diócesis de Saltillo, Coahuila, Raúl Vera, quien precisó que ante estos hechos la Iglesia católica y sus jerarcas mexicanos "deben abstenerse de casarse" con el régimen político actual, pues de lo contrario "se perderá a un sector muy importante" de la sociedad.
Entrevistado vía telefónica, desde Alemania el prelado dijo estar "sumamente apenado" de que en este momento el episcopado mexicano "esté cuestionado" por la asistencia de jerarcas, como Carlos Aguiar Retes, y el arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, al acto político de Felipe Calderón, en el Auditorio Nacional.
"Que no se entienda que nosotros nos sumamos a la oligarquía de los empresarios y que apoyamos lo que se anuncia dentro del gabinete de Calderón: de ser un continuador de la ideología neoliberal y de la represión de aquellos que no estén de acuerdo con su gobierno.
Vera López indicó que la breve toma de protesta del mandatario mexicano en la Cámara de Diputados y la batalla entre legisladores que la antecedió, así como la reunión de panistas del Auditorio Nacional, son resultado de cómo se dio la pasada contienda electoral y la división que presenta el país, "donde los pobres están (manifestándose) en la calle, los políticos divididos en San Lázaro y las elites privilegiadas han ayudando a que Calderón llegue al poder".
Expuso que esta serie de acontecimientos "indica que México está en la crisis política más grave de su historia desde la Revolución de 1910".
En este escenario, dijo que la Iglesia católica del país debe mantenerse apegada a los preceptos que señala el evangelio: a la justicia, a la verdad, a la libertad y a los valores del reino de Dios.