Tunden a reporteros
Saltillo, Coah., 2 de diciembre. Asistentes al mitin que encabezó Andrés Manuel López Obrador en la sociedad mutualista Manuel Acuña de la capital coahuilense agredieron a varios periodistas luego que el "presidente legítimo'' habló del papel de las televisoras nacionales como "alcahuetes de la derecha" y del virtual boicot que han aplicado a sus actividades y de todos aquellos que lo apoyan.
Al escucharlo, mucha gente empezó a aplaudir y gritar "¡fuera!, ¡fuera!" a los reporteros que ahí se encontraban.
De pronto, dos hombres ubicados en las primeras filas se lanzaron a golpear al corresponsal de Televisa, Milton Martínez, y en seguida se fueron contra Daniel Aguirre, reportero de la repetidora local del mismo consorcio. Los otros periodistas que cubrían la información del tabasqueño fueron agredidos, lo que devino en una batalla campal, a la que se sumaron elementos de seguridad del perredista.
Enfurecida, la gente que participaba en la camorra se lió a golpes con Marconi de la Borbolla, reportero de Televisión Azteca Noreste; con los fotógrafos Miguel Sierra, del periódico Vanguardia de Saltillo, y con Miguel Angel Reyna Flores, de la agencia noticiosa Infonor.
En la revuelta, la periodista radiofónica Magadalena Guardiola fue pisoteada y el corresponsal de La Jornada en Coahuila, Leopoldo Ramos, recibió múltiples puñetazos en el rostro que le ocasionaron un hematoma y la pérdida momentánea de la visión.
Al ver lo que ocurría, López Obrador trató de calmar los ánimos y desde el micrófono pedía a la gente no agredir a los reporteros, "ya que ellos nada más son trabajadores, no son los de arriba; ellos son trabajadores, con ellos no es el problema".
Sin embargo, los ánimos en la mutualista Manuel Acuña seguían desbordados, sobre todo porque entraron a la trifulca otras personas identificadas como elementos de seguridad del perredista.
Los escoltas del "presidente legítimo" prácticamente lo levantaron en vilo para sacarlo del lugar en medio de la gresca que aún no cesaba.
Ya con López Obrador en su camioneta, la agresión hacia los periodistas continuó un rato. Fue necesario que se agruparan para salir y evitar que aquello tuviera peores consecuencias.