Propone que el Congreso de la Unión sea el espacio para rediseñar la vida institucional
Encinas: Legislativo, el interlocutor ante la "ilegitimidad" de Calderón
En manos de los habitantes y de las autoridades capitalinas, impedir que el gobierno federal quiera frenar el desarrollo de la ciudad como lo intentó en el sexenio pasado, señala el mandatario
Ampliar la imagen El mandatario local, Alejandro Encinas, baila una pieza de danzón tras reinaugurar el Jardín de la Tercera Edad, en el Bosque de Chapultepec Foto: Carlos Cisneros
Ampliar la imagen Una pareja de enamorados festejó así la reapertura del Jardín de la Tercera Edad, ayer en el Bosque de Chapultepec Foto: Carlos Cisneros
Ante la "ilegitimidad" del Ejecutivo federal y el rezago en el Poder Judicial, deberá ser el Congreso de la Unión el espacio natural para abrir los puentes de diálogo e iniciar el rediseño de la vida institucional del país, consideró el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas Rodríguez.
Expuso que la situación que se presentó en la Cámara de Diputados el pasado viernes no debería asustar a los ciudadanos, pero tampoco puede ser ése el perfil del Poder Legislativo. Confió en que los diputados y senadores tendrán la suficiente capacidad para solucionar las diferencias y convertirse en actores de interlocución entre las fuerzas políticas.
En entrevista, luego de entregar vehículos a la policía del DF, el mandatario capitalino advirtió que Felipe Calderón difícilmente podrá salir por la puerta principal al concluir su gestión, si en el acto de toma de posesión entró y salió por la puerta de atrás.
Señaló que una vez más fallaron quienes afirmaban que durante el cambio de poderes se iban a presentar situaciones de violencia; inclusive algunas embajadas llegaron a comparar el escenario con el de Oaxaca, pero una vez más se impuso la gobernabilidad democrática y "no se rompió ningún vidrio, no se tomó ninguna radiodifusora, ninguna sede de los poderes locales o federales", ni hubo muertos por represión.
Encinas no descartó que el gobierno federal intente frenar a la administración de Marcelo Ebrard y el desarrollo de la ciudad, como lo pretendió en varias ocasiones durante el sexenio que concluyó, lo cual deberá ser impedido por las autoridades capitalinas y los habitantes de la ciudad.
Dijo esperar que la administración federal respete al Gobierno del DF y su autonomía, lo cual se verá con mayor claridad cuando se apruebe el presupuesto para el próximo año.