La PFP mutiló dos dedos a profesora de la UAM

Fianzas por $4 millones a presos enviados a Nayarit

Marcha hoy en Tepic por la libertad de detenidos en Oaxaca

JAIME AVILES

Fianzas personales hasta de 4 millones de pesos las más altas fijaron los tres jueces penales del reclusorio de San José del Rincón, en Tepic, Nayarit, a los 141 ciudadanos oaxaqueños ­35 mujeres, 106 hombres­ que se encuentran presos en aquella entidad acusados de "sedición", "asociación delictuosa", "incendio" y "resistencia de particulares", entre otros delitos, informó anoche Carlos Andrés del Campo Ortega, representante de la Liga Mexicana de Defensa de los Derechos Humanos (Limeddh).

Por su parte, Cuauhtémoc Mendoza Ramírez, habitante del Distrito Federal, denunció que a su hermana Blanca, de los mismos apellidos y de 53 años, elementos de la Policía Federal Preventiva "le cercenaron dos dedos de la mano izquierda", durante el ataque de los uniformados al atrio del templo de Santo Domingo el pasado 25 de noviembre en el centro histórico de Oaxaca.

"Ella me dice que en medio de los gases lacrimógenos y de los golpes y de las corretizas no supo cuándo perdió los dedos", explicó Mendoza Ramírez, vía telefónica desde Tepic, antes de agregar que "gracias a eso ya no la torturaron en la cárcel" de Miahuatlán.

Blanca Mendoza Ramírez es profesora de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma Metropolitana y, en medio de los enfrentamientos del 25 de noviembre, fue detenida porque "estaba haciendo un trabajo de campo" sobre el movimiento que demanda la renuncia del gobernador Ulises Ruiz, pero "no pertenece a la APPO (Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca)", subrayó su hermano.

Ante la desazón de la iniciativa privada nayarita, que vio con auténtico horror la llegada de "los oaxaqueños" al presidio de El Rincón ­que, por cierto, no es de "máxima seguridad", como insisten en describirlo algunos comentaristas­, los familiares de los detenidos y un abanico de organizaciones solidarias marcharán hoy, lunes, por las calles del centro de Tepic para exigir la libertad inmediata de los 141 presos políticos.

Contra los rumores que circularon el pasado viernes de que el grupo sería "devuelto" a los penales de Miahuatlán y Tlacolula, Oaxaca, los tres jueces penales adscritos a El Rincón declararon a los detenidos "formalmente presos" por los delitos de "incendio" y "daños" contra el Tribunal Superior de Justicia del estado de Oaxaca, una larga lista de hoteles y moteles, un negocio de artesanías perteneciente a la Confederación Patronal de la República Mexicana y la línea de Autobuses de Oriente.

Los autos de formal prisión fueron dictados contra aquellos a quienes se acusa de "sedición", "asociación delictuosa" y "resistencia de particulares" en perjuicio de "la sociedad oaxaqueña" en abstracto. Las fianzas van de 4 millones de pesos, las más altas, "y de allí para abajo", explicó Del Campo Ortega, activista de la Limeddh, que asiste directamente en Tepic a los familiares de los presos políticos, quienes desde el jueves pasado permanecen dentro de un improvisado campamento frente al palacio del gobernador priísta, Ney González.

Ese día, por la mañana, el mandatario, a quien el PRD acusa de haber obtenido la gubernatura mediante un fraude electoral en 2005, se hizo eco de las quejas de empresarios y comerciantes nayaritas, según las cuales "la presencia de los oaxaqueños es indeseable porque desalentará las inversiones productivas" en la entidad.

Acusó de "falta de respeto contra Nayarit" al ex presidente Vicente Fox, por haber enviado a El Rincón a los 141 detenidos en Oaxaca "sin habernos tomado en cuenta", toda vez que "somos un estado que no da problemas a la Federación, entonces la Federación no debe traernos sus problemas".

Tras identificarse así con los reclamos de la iniciativa privada local, González afirmó, sin embargo, que brindaría "todo tipo de facilidades a los familiares de los reos (sic) que vengan a visitarlos". En efecto, no entorpeció la instalación de un campamento para ellos delante del palacio de gobierno pero, de inmediato, como por arte de magia, apareció una feria delante del campamento "para que (éste) no se vea", dijo Carlos Andrés del Campo, quien insistió en que sigue en pie la convocatoria a organismos defensores de derechos humanos de México y del mundo para que se sumen a la lucha por la liberación de los presos políticos de Tepic y proporcionó una dirección electrónica ­[email protected]­ para que se comuniquen quienes deseen obtener más información al respecto.