Penultimatum
Tras el pecado de la carne
ESTA COLUMNA HA sabido en fuentes por lo común no sólo bien informadas sino acordes con los nuevos tiempos, que una agrupación católica de gran raigambre, La Mano Amiga, presentará una querella de índole penal y civil contra un grupo de sexópatas avecindado en varios lugares del país pero no al mismo tiempo. Este grupo pretendió con descaro y desvergüenza usar el mismo nombre de la benemérita agrupación para realizar una velada de calistenia digital en pro del ahorro de las tensiones laborales y algunas otras de carácter cultural.
SIEMPRE LO HEMOS sabido: hay cosas que sabe Onán y las ignora don Juan (Antonio Machado); siempre hemos oído que hay impúdicos que elogian lo que llaman ''La justicia sexual por mano propia", pero nunca habíamos visto el caso de que a una agrupación del prestigio de La Mano Amiga se le quisiera enlodar asociándola con las descargas del puño libidinoso. Esta sección se une a las protestas y asegura que en materia de alivios individuales, el único que la nueva sociedad permite es el suspiro.
MIENTRAS EN MEXICO las agrupaciones patrocinadas conjuntamente por El Yunque y la jerarquía eclesiástica se aprestan a dar la batalla que elimine del Cuadro Básico de Salud a la píldora del día siguiente, en Brasil el ala más retardataria de la Iglesia católica critica la distribución gratuita entre mayores de 50 años de medicamentos contra la impotencia y la disfunción eréctil. El programa piloto (denominado Pinto Alegre término coloquial de llamar al pene en portugués) lo iniciaron en mayo pasado las autoridades de Novo San Antonio, estado de Mato Grosso, pero fue suspendido temporalmente hace dos semanas, pues varios beneficiados mayores de 70 años aprovechaban el medicamento (Cialis, un compuesto que compite con el que anuncia Pelé) para ''serle infieles a sus esposas con muchachas mucho más jóvenes", según el presidente municipal Antonio Joao Luz. Algunas organizaciones religiosas ven en esta entrega de medicamentos a los más pobres ''una forma de ir en busca del pecado de la carne cuando el cuerpo exige ya reposo", según expuso Bartolomé Almeida, dirigente de Todo dentro de la familia. Pero algunos de los ''infieles" señalaron que se veían obligados a buscar placer en otro lado porque sus esposas ya no querían saber más de sexo. Mientras, varias localidades brasileñas analizan establecer el programa piloto de Novo San Antonio. Las autoridades del sector salud estudian la forma de subsanar las irregularidades y atender las necesidades de los que menos tienen.
LA REVELACION DE LA SEMANA: ''Creo que la religión siempre ha tratado de generar odio contra los gays. La religión impulsa el odio y el rencor contra los homosexuales. Conozco a muchas personas homosexuales que aman su religión. Pero desde mi punto de vista yo prohibiría la religión por completo por el fanatismo que engendra. La religión organizada no parece funcionar. Convierte a la gente en lemmings (míticos roedores que siguen ciegamente a sus líderes) llenos de odio y realmente no es compasiva": Elton John.