Su análisis también ayudaría a mejorar la calidad de vida de las personas, dice entomólogo

Hormigas, fuente de investigación sobre la reproducción humana

Una reina puede conservar espermas vivos hasta por más de 15 años, según un estudio

Servirían para saber cómo prolongar la vida útil de un antibiótico y su elaboración, explicó Fernández Marín

DPA

Ciudad de Panamá, 8 de diciembre. Un exhaustivo estudio sobre hormigas puede contribuir a mejorar la calidad de vida y la salud reproductiva en los seres humanos, advirtió el entomólogo panameño Hermógenes Fernández Marín, del Instituto Smithsoniano de Investigaciones Tropicales, con sede en Panamá.

Fernández Marín, quien examina el comportamiento de los insectos sociales desde la década de 1990, comentó que recientes investigaciones revelan que una reina en una colonia organizada tiene la capacidad de almacenar el esperma de distintos individuos hasta por más de 15 años, sin el uso de métodos de congelación.

"Los compuestos producidos por las hormigas pueden mantener espermas vivos durante largo tiempo", indicó el investigador tras concluir una disertación sobre la complejidad de la vida social de esos insectos, la cual fue seguida con interés por ambientalistas, estudiantes y profesores universitarios.

El investigador aclaró que desde hace millones de años, las hormigas, emparentadas con las avispas, dejaron de utilizar bacterias para enfrentar infecciones, y aprendieron a sintetizar en sus glándulas metapleurales sustancias que combaten enfermedades, con lo cual obtuvieron una ventaja en el proceso evolutivo.

"En términos conceptuales, es posible analizar un sistema para construir modelos que ayuden a entender cómo prolongar la vida útil de un antibiótico y la estrategia de elaboración, lo cual no significa que los humanos deban utilizar las mismas sustancias que los insectos para garantizar la salud", subrayó Fernández Marín.

Insectos contra infecciones

Desde hace largo tiempo, los científicos intentan descifrar los mecanismos de defensa de los insectos para generar terapias y respuestas inmunes ante la proliferación de agentes patógenos.

El tema es el eje central del filme El curandero de la selva, protagonizado por el actor británico Sean Connery, cuyo personaje encuentra la cura del cáncer en un tipo de hormigas en las selvas de Brasil.

Sin embargo, Fernández Marín indicó que son necesarios más estudios sobre la eusociedad (desarrollo de vínculos equilibrados y cooperación en el cuidado de las crías) y las interac-ciones en el complejo mundo de los insectos sociales.

Otra asombrosa capacidad de los insectos es la creación de herbicidas para eliminar o impedir el crecimiento de plantas cerca del nido de las colonias, que son una especie de superorganismo viviente regido por la división de tareas y poderes, así como por la competencia en el control de recursos del ecosistema.

Estudios a escala mundial

Debido a los avances en la investigación de los himenópteros en áreas tropicales, Fernández Marín fue invitado por científicos daneses para realizar pruebas a mayor escala sobre los diversos compuestos bioquímicos que combaten las infecciones. Estudios similares se realizan en institutos especializados en Australia.

Los investigadores también intentan explicar el exitoso mecanismo de comunicación horizontal de los himenópteros, incluido el uso de feromonas, los mensajes que comparten y la frecuencia de los contactos, así como el desplazamiento rápido y coordinado a los vivacs o asentamientos temporales en los bosques tropicales.

La familia de las hormigas abarca unas 11 mil especies en países templados y tropicales. Cada año son descubiertas nuevas especies con diversos hábitos de alimentación, como el cultivo de hongos y la obtención de extractos nutritivos de otros seres vivos.

Los himenópteros poseen una alta especialización en el trabajo, pero algunos han desarrollado tendencias al parasitismo, lo cual es motivo de estudio biológico y social.