Estudian consejeros la posibilidad de extraer una muestra de boletas

Busca el IFE solución intermedia a la petición de abrir paquetes electorales

La ley marca la destrucción del material en este mes; consenso para una prórroga

ALONSO URRUTIA

En esta semana el Instituto Federal Electoral (IFE) decidirá sobre el futuro de las boletas electorales a las que varios ciudadanos y medios de comunicación han solicitado acceder para realizar un recuento. Los consejeros electorales iniciarán discusiones privadas en torno a la nueva fecha en que deberán cumplirse la disposición legal de destruir el material electoral.

El próximo martes, la Comisión de Transparencia revisará y responderá en definitiva a los cuatro recursos interpuestos contra la decisión original del organismo electoral de rechazar el acceso a las boletas electorales. Todo apunta a que los consejeros ratificarían los criterios originales y rechazarán la apertura del material.

Conforme al Programa Integral del Proceso Electoral, tendría que ser en diciembre cuando el IFE cumpliera con lo establecido en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales según lo cual, el material electoral deberá destruirse una vez concluido el proceso electoral.

Sin embargo, ante los recursos interpuestos para acceder a las boletas, prácticamente existe consenso para que se prorrogue el cumplimiento de esta disposición a efecto de que los ciudadanos cuenten con la posibilidad de agotar sus recursos jurídicos relacionados con el acceso a la información.

Así, al prorrogarse el plazo para la destrucción de boletas, que decidirán los nueve consejeros electorales en estos días, quienes recurrieron de la decisión del IFE de no permitirles el acceso a las boletas podrán acudir al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, instancia que decidirá en definitiva si es posible la apertura.

Sin embargo, entre las opciones que se valorarán entre los consejeros, está la posibilidad de que se determine una muestra de boletas para que el organismo realice estudios que pudieran redundar en acciones ­especialmente de capacitación de los funcionarios de casilla­ en futuros procesos electorales.

La posibilidad de extraer muestras del material electoral ha tenido destinos diversos en las dos ocasiones en el que el IFE lo ha intentado: en el año 1997, cuando el organismo aprobó esta medida para que analistas, instituciones de educación superior e investigadores pudieran acceder a ellas, ésta fue revertida por disposición de los magistrados del TEPJF.

El argumento: los paquetes electorales solamente podrían utilizarse y abrirse bajo supuestos contenidos en la ley. Con ello se detuvo esa posibilidad y se anuló el acceso a esa muestra. Para el año 2003, se volvió a aprobar la selección de una muestra, aunque en esta ocasión no se incluyó la apertura de los paquetes, por lo que solamente se accedió a las actas.

Ese criterio, aunado a otros más que en su momento resultaron polémicos ­como no considerar las boletas como documento público- serán los que podría ratificar la Comisión de Transparencia del IFE este martes. Si bien esta instancia podría revocar la decisión original, todo apunta a que se ratificará la negativa al acceso.

Por lo que hace al plazo para la destrucción de boletas, lo que discutan los consejeros en privado deberá ser avalado en la sesión de Consejo General que podría efectuarse esta misma semana o en los primeros días de la próxima.