Buscarán fórmulas para aumentar asignaciones
No aceptarán diputados recorte al gasto educativo
La Cámara de Diputados anunció su compromiso con la educación pública superior y en particular con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al comprometerse a no aceptar la reducción al presupuesto 2007 de esas instituciones, como pretende el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, y anunció que buscará fórmulas para incrementar las asignaciones con el propósito de llegar a la meta de 8 por ciento del producto interno bruto (PIB) para el gasto educativo.
Por unanimidad, todos los grupos parlamentarios representados en la Cámara de Diputados, incluido el Partido Acción Nacional (PAN), rechazaron, al aprobar el punto de acuerdo, las aseveraciones del presidente de la Comisión de Presupuesto, Raúl Alejandro Padilla, quien descalificó, por ignorancia, la trascendencia, el papel histórico y el significado de la UNAM como motor de movilidad social.
Los señalamientos de Padilla, que fueron rechazados por la mayoría de los sectores académicos, estudiantiles, intelectuales, políticos y sociales del país, dieron pie, durante la sesión ordinaria del pleno camaral, a una larga exposición de todas las fuerzas políticas en reconocimiento a la máxima casa de estudios.
Fue Alejandro Chanona, coordinador de la bancada de Convergencia, quien ponderó los resultados que a lo largo de su historia ha generado la UNAM, que con su pirámide educativa y la enseñanza superior que imparte ha propiciado importantes y sustanciales cambios en el país. También señaló que al igual que la universidad nacional, el resto de las instituciones de educación superior, como la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y el resto de universidades públicas en el país merecen un trato presupuestal que conlleve la oportunidad de crecimiento de la sociedad, sobre todo de aquella con menos oportunidades.
Por tanto, Chanona propuso lo siguiente: "La Cámara de Diputados manifiesta su compromiso con la educación pública superior, así como con los centros de investigación de todas las disciplinas y reconoce su contribución al desarrollo de México, en particular la participación de la UNAM; se exhorta a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública a no asumir la reducción al presupuesto 2007 propuesta por el Ejecutivo federal a las instituciones de educación superior, y a que analice y dictamine las fórmulas para incrementar, en términos reales, sus asignaciones para el año 2007".
Enseguida el petista Leopoldo Arreola ocupó la tribuna para extender el respaldo de su partido a una nueva política para la educación pública superior. "Hoy sabemos bien que los países que se dedican y que invierten en educación, ciencia y tecnología e innovación son los que tienen más posibilidades de salir adelante en el desarrollo económico y social de la población".
Preocupado, José Manuel del Río Virgen, de Convergencia, advirtió que el IPN, así como el resto de instituciones públicas de educación superior, corren un grave riesgo y no hay que escatimar, dijo, un solo peso en ellas. "Si los recursos llegan a las instituciones públicas de educación superior tendremos mejores mexicanos".
Por el Revolucionario Institucional (PRI), Daniel Amador Gaxiola señaló que su partido está preocupado porque "el gobierno pretende relegar la educación pública a un segundo plano", y preguntó si Felipe Calderón comparte los puntos de vista de Raúl Alejandro Padilla: "Es importante determinar si existe un afán privatizador detrás de los recortes propuestos por el Poder Ejecutivo en lo relativo a las instituciones de educación superior... no podemos contar con la educación pública que el país necesita si utilizamos criterios neoliberales que desprecian la contribución social de nuestras universidades públicas y minimizan su contribución al desarrollo del país".
Por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Raymundo Cárdenas invitó "a los legisladores de los estados más atrasados" a no admitir más autoritarismo y engaño de la Secretaría de Hacienda sobre las universidades públicas:
"Vamos a sacarlas de una vez por todas del ahogo económico, vamos a reconocerle a la UNAM todos sus valores, lo mismo al Politécnico, pero entendamos que las entidades más pobres de México no van a salir del atraso si no tienen universidades de calidad, pujantes, metidas a la innovación y al desarrollo del conocimiento".
Entonces, el priísta Adolfo Ríos Camarena propuso, desde su curul, que se incluyera en el punto de acuerdo que el gobierno cumpla invirtiendo un presupuesto de ocho por ciento del PIB para la educación en todos sus niveles.
Tras esa moción, el panista Felipe Borrego, quien se dijo orgulloso egresado de la universidad pública, reconoció la presencia histórica de la UNAM en la vida del país y, por tanto, "el PAN está consciente y respalda a la universidad nacional y a todas las universidades e instituciones de educación pública para que tengan un presupuesto digno y acorde a sus necesidades... el PAN, como desde 1939, sigue y seguirá siendo un partido que con su filosofía humanista apoya la educación pública y en este momento a la Universidad Nacional Autónoma de México".
Más adelante la legisladora panista Laura Angélica Rojas fijó definitivamente la posición de su partido al referir que ella y todos sus correligionarios "creemos que la UNAM merece no sólo nuestro reconocimiento y apoyo a este punto de acuerdo, sino un esfuerzo de todos los que integramos esta cámara por consensuar las reformas fiscales que son necesarias para garantizar la educación pública, laica, gratuita y universal".
Tras una larga lista de participantes e intervenciones de diputados de PRD, PT, Convergencia y PRI se aprobó, con la conducción de la presidencia de Jorge Zermeño, el punto de acuerdo con la siguiente adición:
"Se exhorta a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública a no asumir la reducción al presupuesto 2007 propuesta por el Ejecutivo federal a las instituciones de educación superior y a que analice y dictamine las fórmulas para incrementar en términos reales sus asignaciones para 2007, con respecto al presupuesto de 2006, en el marco de la Ley General de Educación que establece, como meta de gasto en educación, el 8 por ciento del producto interno bruto".