A puerta cerrada, diputados de la Comisión de Hacienda rechazan la iniciativa
SAT: las críticas al impuesto a refrescos buscan defender intereses monopólicos
Se busca suplantar el 20% de IEPS que deberá eliminarse por mandato de la OMC
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Con la aplicacación del impuesto a los refrescos el gobierno federal espera captar 3 mil 100 millones de pesos, informó José María Zubiría, jefe del SAT
Foto: José Carlo González
El gobierno federal aseguró este martes que las críticas de empresarios refresqueros a la propuesta de gravar con 5 por ciento el consumo de estos productos a partir de 2007, que actualmente se discute en el Congreso, busca defender intereses monopólicos y no la economía popular.
En los últimos días, los empresarios refresqueros que operan en México han lanzado una campaña para asegurar que la propuesta gubernamental de aplicar una tasa única de 5 por ciento a los refrescos endulzados con azúcar o fructosa afectará a las personas de menores ingresos.
''No nos dejemos confundir con los argumentos que se están levantando. Estamos entrando en una industria muy poderosa que concentra un mercado que puede, si esto llegara a suceder, considerarse con características monopólicas'', afirmó, respecto de la campaña de la industria refresquera, José María Zubiría Maqueo, jefe del Servicio de Administración Tributaria (SAT), el ente público encargado de recaudar impuestos.
En una conferencia de prensa calificó de ''absurdo'' el argumento de los industriales refresqueros, en sentido de que el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) de 5 por ciento, propuesto en la Miscelánea fiscal 2007 podría hacer caer hasta en 80 por ciento la venta de gaseosas. Con la medida, el gobierno federal espera captar 3 mil 100 millones de pesos. La industria asegura que, de poner en práctica ese impuesto, perdería 20 mil millones de pesos.
''Con una reducción de 5 por ciento al precio de los refrescos, el crecimiento de la industria sería brutal. No nos dejemos apantallar y confundir con los argumentos de las empresas refresqueras, pues estamos entrando en una industria muy poderosa que concentra un mercado con características monopólicas'', aseguró Zubiría Maqueo.
Espejismo, el argumento de que serán reducidos los impuestos a refrescos
La aplicación de 5 por ciento de IEPS a los refrescos afectará a todas las variedades, sin importar si están endulzados con azúcar, fructosa o si son dietéticos, aseguró la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (Anprac), al señalar que se trata de una medida que busca suplantar el 20 por ciento de IEPS aplicado a las importaciones y bebidas que contengan fructosa, que deberá ser eliminado como resultado de un fallido pleito con Estados Unidos en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
El asesor económico de la Anprac, Juan Carlos Zeppa, advirtió que es ''un espejismo'' el argumento de que habrá una reducción impositiva a los refrescos, al pasar de 20 por ciento del impuesto especial sobre producción y servicios, que se repercute al consumidor, a sólo 5 por ciento.
Lo real, dijo, es que habrá un incremento de ese 5 por ciento porque los refrescos endulzados con azúcar no tenían ese gravamen, y puntualizó que la proporción de refrescos endulzados con fructosa es muy pequeña, por lo que el impacto al consumidor será general.
''Con esta nueva fórmula se pretende no gravar los refrescos con fructosa con ese 20 por ciento, pero sí aplicar el 5 por ciento de forma general. Hay que precisar que los edulcorados con fructosa representan no más de 300 mil toneladas al año, mientras el azúcar para endulzar refresco significa un millón 600 mil toneladas, de tal forma que era mínimo lo que se venía gravando''.
Señaló que desde que la OMC falló en contra de México y mandató que eliminara el 20 por ciento al uso de fructosa, el país se encuentra en una encrucijada, y en respuesta el Ejecutivo y el Congreso actúan ''desproporcionadamente al querer gravar todos los refrescos''.
Detalló que las condiciones de compra de azúcar y fructosa se han complicado en los últimos años, debido a que cuando en México se cerró el mercado a la fructosa los refresqueros optaron por endulzar con azúcar, lo que propició que de ser un mercado superavitario en ese producto se volviera deficitario, y se produjera un incremento de precios de casi 30 por ciento.
No a la reducción de deducibilidad
en restaurantes: Canirac
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Sergio Larraguivel Cuervo, señaló que la disminución de la deducibilidad de consumos en restaurantes de 25 a 12.5 por ciento, pondría en riesgo el crecimiento de la industria durante 2007.
Puntualizó que de aprobarse la medida propuesta por la Secretaría de Hacienda, el crecimiento del sector restaurantero para el año próximo no sería del 3.5 por ciento previsto, sino sólo de 3 por ciento.
Detalló que con el 25 por ciento actual, para 2007 los ingresos del sector serían de 160 mil millones de pesos entre los 243 mil restaurantes del país, lo que representaría un incremento de 3.5 por ciento. Pero de aprobarse la reducción de deducibilidad, los ingresos serían de 158 mil millones de pesos, un crecimiento de 3 por ciento, y se dejarían de crear 11 mil plazas de trabajo.
Legisladores desechan aprobar el incremento del precio a cigarrillos
En reunión a puerta cerrada, la mayoría de diputados que integran la Comisión de Hacienda rechazaron la iniciativa de Felipe Calderón para incrementar el impuesto especial sobre productos y servicios (IEPS) en los refrescos para el próximo año, y desecharon aprobar la Ley de Aportaciones de Seguridad Social, que implicaría incrementar en 3 pesos el precio por cajetilla de cigarros, pero que en términos reales implicaría un gravamen de 8 pesos.
El rechazo a esas dos propuestas del gobierno del Partido Acción Nacional (PAN), que se consideraron improcedentes, se fraguó el mismo día en que Armando Salinas Torre se presentó ante la mesa directiva en San Lázaro como el nuevo enlace legislativo del gobierno federal.
Al confirmar el rechazo a esos incrementos, el coordinador de la diputación priísta, Emilio Gamboa Patrón, llamó a la industria tabacalera a evaluar que la iniciativa de gravar más los cigarros ''es del Ejecutivo'' y no de la Cámara de Diputados. Ante la amenaza de las refresqueras, en sentido de trasladar la industria fuera del país, ironizó: ''de México no se va nadie. Es una plaza importante y una economía fuerte. No se irán los refresqueros''.
En entrevista, Gamboa Patrón informó que a más tardar el próximo lunes será aprobada en comisiones la Ley de Ingresos de la Federación 2007, después de que las dos comisiones respectivas en las cámaras del Congreso sesionen en conferencia para apresurar el trabajo legislativo.
Mientras, el legislador Jorge Charbel Estefan Chidiac declaró que este martes los grupos parlamentarios convinieron en desechar la iniciativa de Ley de Aportaciones de Seguridad Social para Atender las Enfermedades Originadas por el Tabaco que Provocan Gastos Catastróficos, propuesta por el Ejecutivo federal para incrementar el precio de los cigarros por cajetilla.
En cambio, la comisión determinará gravar el consumo de tabaco por IEPS, entre uno y tres pesos en términos reales por cajetilla, lo cual permitiría garantizar ingresos adicionales por 2 mil 500 millones de pesos,
Al referirse a la iniciativa de ley calderonista, declaró que se configuró ''una opinión generalizada de que no es constitucionalmente lo más ortodoxa posible, puede generar amparos, no aplicarse y afectar la recaudación''.
Informó que la comisión intenta negociar una tasa fija de 2.5 por ciento de la Recaudación Federal Participable para el Programa de Apoyo para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (PAFEF), al que con esta fórmula se asignarían 30 mil millones de pesos, superior al 1.4 por ciento propuesto por Hacienda en el paquete económico, que equivale a transferencias de sólo 17 mil 500 millones de pesos.
Ratificó el consenso de incluir el PAFEF como un ramo dentro de la Ley de Coordinación Fiscal y establecer un porcentaje fijo de la recaudación federal participable, para que los estados tengan la certeza de que no se les recortarán recursos.
''Nuestro primer objetivo es que sea un octavo fondo del ramo 33, que sea definitivo, permanente y que no sea recortable; lo importante es que ya nunca pueda venir en ceros'', explicó.