Entrevista a ALBERTO CARDENAS JIMENEZ, TITULAR DE LA SAGARPA
Habrá diálogo sin importar las preferencias políticas
Ofrece empujar revisión del capítulo agropecuario del tlcan
"No seré un secretario sordo ni indiferente; tomaré decisiones con la cabeza fría", plantea el ex gobernador de Jalisco, quien resume así su visión de la estructura social rural: "Una pirámide estrecha abajo, con más gente enmedio y con una punta muy sólida"
Ampliar la imagen Alberto Cárdenas Jiménez, el nuevo titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación durante la entrevista que concedió ayer a La Jornada, en la cual sostuvo que dará a todos un trato "justo, parejo y honesto" Foto: Víctor Camacho
Alberto Cárdenas Jiménez aseguró que sostendrá un diálogo con todas las organizaciones de productores, sin importar su tamaño ni preferencias políticas. "No seré un secretario sordo ni indiferente; las decisiones las tomaré con la cabeza fría", sostuvo, y puntualizó que como secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación su trabajo estará más enfocado a los sectores más rezagados.
No habrá distingos: "Me interesa tener una sana relación con todas las organizaciones", y ofreció a todos ejidatarios, indígenas, agroempresarios e inversionistas nacionales y extranjeros un "trato justo, parejo, honesto y limpio".
Pero también advirtió que, como en todas las gestiones del mundo, podría tener errores y equivocaciones. "Espero que sean los menos", dijo.
Dispuesto a poner su sello personal al desarrollo del agro nacional, el ex gobernador de Jalisco se mostró dispuesto a "empujar" la revisión del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y a mirar más hacia la región sur-sureste del país, donde hay un campo con riqueza.
"Hay que ver lo que trae consigo la apertura total en 2008, sus pros y contras para ver qué conviene al país y a la gente, y buscar una decisión intersecretarial, porque esa revisión involucra a varias secretarías y no sólo compete a la Sagarpa", advierte.
Respecto al recorte del presupuesto de la Sagarpa y algunos programas que involucran el desarrollo del campo, Cárdenas Jiménez se mostró optimista: "Es una ecuación de corresponsabilidad, en la cual todos trabajemos al parejo, y que sepan que cuentan con el brazo solidario, humano y subsidiario del gobierno, pero también espero contar con el respaldo de las organizaciones que orienten su trabajo en la presentación de proyectos productivos, en críticas constructivas y en sanos señalamientos de errores".
EL EJIDO, PUNTAL EN SU AGENDA
En entrevista, Cárdenas Jiménez delineó la relación que sostendrá con las organizaciones de productores y la importancia que les concederá: "En mi paso por los tres órdenes de gobierno el más reciente como presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería del Senado demostré que he dado un trato justo, parejo y honesto a todos por igual, y así actuaré. Escucharé a todos, tengan razón o no, e incluso en el momento más álgido del debate".
Por eso, resaltó que en su empeño por lograr un campo más justo y humano, equitativo y productivo, donde se distribuya mejor la riqueza y generen más oportunidades, el ejido tendrá un papel destacado: "Creo en su función histórica, y si en el siglo pasado no hubo perfección, sí se lograron decenas de experiencias exitosas. Sé que los pequeños pueden ser grandes y que éstos en algún momento fueron pequeños. Por eso mi esfuerzo estará centrado en impulsar mucho a los de abajo, pero cuidando a los de arriba".
Y abundó en su modelo: "Somos una pirámide en la cual todos nos necesitamos. Tenemos que eslabonar bien esa estructura, que los pequeños se unan y organicen, que todos compartamos visiones regionales de proyectos y de cómo vamos a jugar para ganar en equipo, porque la lucha contra la pobreza hay que ganarla creando riqueza, con proyectos productivos alternativos y diversificados. Por eso allí estará el mayor porcentaje de mi trabajo".
A los "grandes" dijo refiriéndose a los agroempresarios hay que cuidarlos y quizá darles un poco de ayuda para que se mantengan allí, "porque el interés del gobierno es ganar mercados globales, pero sin olvidar a los que están en medio de la pirámide, y que también cuentan en la agenda del desarrollo para el campo. Creo que México está convocado a jugar un liderazgo en la producción de alimentos inocuos y de calidad".
Y resumió su propuesta de estructura social rural: "una pirámide más estrecha abajo, con más gente en medio y con una punta muy sólida".
Y en su nuevo papel político como titular de Sagarpa, Cárdenas Jiménez se dibujó: "Me queda claro que seré uno de los líderes nacionales que van a partirse el alma y el corazón para que la gente del campo tenga una vida digna. Eso implica que viva la democracia y la libertad, que nadie se sienta asolado ni oprimido, que no se le obligue a pertenecer a alguna organización para acceder a los recursos federales y menos que se sienta abandonado por el gobierno".
Pero también fue claro en destacar que las diferencias tendrán que resolverse en el seno del Consejo Mexicano para el Desarrollo Rural Sustentable y no en las calles.
"Espero decirnos allí las cosas cara a cara, entendiéndonos y tomando las decisiones que sean pertinentes y prudentes, y si se demuestra que estemos mal, corregiremos. Ese es el espacio del debate: que vean que estaré allí en total apertura para que no estén en la calle (manifestándose)", apuntó.
NO ME TOCAN ERRORES DEL PASADO
Insistió en mostrar que aunque la propuesta de presupuesto tiene un ajuste a la baja, existen los suficientes mecanismos financieros para respaldar a los productores: "Tenemos un brazo con el que podremos responder si colocamos adecuadamente los fondos en los instrumentos apropiados y sacarles el máximo provecho".
Sin embargo, descartó la posibilidad de eliminar los subsidios, como lo recomendó la Organización para la Coperación y el Desarrollo Económicos en su estudio Política agropecuaria y pesquera en México. "Estoy en favor de los subsidios que estimulen la producción y productividad, que ayuden más a la investigación y desarrollo de tecnologías modernas; esos se sostendrán", aseguró.
Pero no descartó la posibilidad de someter a revisión aquellos que "todos tenemos identificados como inadecuados para el país", y aunque aceptó eso no se puede realizar de un día para otro, aunque adelantó que entre los que se examinarán están los subsidios a los energéticos, Procampo y los involucrados en Apoyos y Servicios a la Producción Agropecuaria, mas se hará "con la cabeza fría, sin desgarrarnos ni golpearnos unos a otros".
Al referirse al asunto de expropiación de los ingenios y la comercialización del azúcar en el marco del TLCAN, Cárdenas Jiménez consideró que en la negociación con Estados Unidos para que cumpliera con lo pactado posiblemente hubo errores, y en el caso de los ingenios ya un equipo revisa acotó todos los aspectos de la expropiación y de la administración; la pretensión es tener una política sólida, con una visión integral para aprovechar ese acuerdo comercial.
Nuevamente descartó que el resultado del acuerdo traiga consigo la desaparición de los productores de granos básicos: "El país está preparado para la apertura. No estamos partiendo de cero y la desgravación de 22 productos en 2003 trajo consigo una experiencia de búsqueda de mejores mercados y de gratos resultados en la producción."
Respecto a la polémica en el inicio de la siembra de maíz transgénico, se pronunció en favor de la biotecnología. "El debate es si el país abre o cierra la puerta a los avances tecnológicos. Mi postura es que la abramos con cuidado, no de par en par sino poco a poco, garantizando que no vamos a afectar la salud de la población ni de las próximas generaciones. Con ese concepto, y cumpliendo con la ley, hagamos uso de la biotecnología".
Puntual en el tiempo concedido para la entrevista, el titular de Sagarpa resaltó que no ocultará nada: "hablaré en plata pura, daré a conocer los balances", pero también asentó que está en contra de los posicionamientos con una visión derrotista y de fracaso, porque eso sólo genera falsos debates. "Me interesa escuchar y debatir, pero más con una visión propositiva, que sirva para detectar dónde están los tornillos flojos para apretarlos", concluyó Cárdenas Jiménez.